Sin excusas ni paños calientes. El Tecnyconta Zaragoza necesita sumar victorias de manera urgente. Tras la derrota en Tenerife y el ridículo ante el Herbalife Gran Canaria, los rojillos se metieron por primera vez en descenso, el fin de la temporada está demasiado cerca y los partidos comienzan a ser a vida o muerte. A ello hay que sumar que el calendario no ayuda y el primer Miura que le espera a los de Luis Guil es el Barcelona Lassa (12.30 horas) en el Palau Blaugrana, un equipo con tanta calidad como irregularidad.

Las referencias para obtener la victoria en el feudo azulgrana pasan por repetir la buena defensa exhibida ante el Iberostar Tenerife, aunque para conseguirla deberá mejorar su fluidez a la hora de mover el balón y sus porcentajes. En el recuerdo queda la canasta de Sam Van Rossom en aquel lejano 25 de octubre del 2010 que le dio el triunfo al entonces CAI Zaragoza por 70-71. El belga demostró que se puede vencer en el Palau y, vista la trayectoria de los culés esta temporada, así como la cantidad de bajas que acumulan, la de hoy es una ocasión única de repetir aquella machada.

Al rescate llega Marcos Knight, quien se entrenó el pasado viernes por primera vez con sus compañeros y, sin apenas tiempo para aterrizar y acoplarse, ya tiene una prueba de fuego. De él se espera que desahogue a los exteriores en la rotación, visiblemente cansados y densos en los últimos encuentros, que aporte puntos y que eche una mano en el aspecto reboteador, algo que ya ha demostrado con creces en su aventura alemana. Eso sí, habrá que tener paciencia porque, como él mismo reconoció, se encuentra algo cansado por los viajes, el reconocimiento médico y el frenesí de esta semana.

Un rival irregular

En cuanto al rival, la Liga es el último resquicio de esperanza que le queda al Barcelona Lassa después de los naufragios de la Copa del Rey y, sobre todo, de la Euroliga. Sin nada en juego, los del cuestionado Bartzokas llegan a la cita tras haber perdido en la prórroga ante el Fenerbahce y necesitan ganar para evitar a los equipos más fuertes en los playoffs.

Para el partido de hoy, el Barcelona sigue arrastrando una plaga de bajas y, al grupo de la enfermería, se sumó hace unos días Brad Oleson, quien ya no jugó en Estambul debido a un esguince en el tobillo derecho que sufrió el pasado sábado en Las Palmas y cuya participación en el choque es seria duda. Tampoco estuvieron en Estambul Faverani por una inflamación rodilla derecha; Doellman por una lesión en el sóleo; Lawal, lesionado desde agosto con una rotura del tendón rotuliano de la rodilla izquierda; Pau Ribas, desde octubre con una rotura completa del tendón de Aquiles del pie izquierdo y Renfroe, este último con permiso del club para viajar a los Estados Unidos. Por lo tanto, las rotaciones de ambos conjuntos se encuentran muy mermadas aunque por motivos distintos. Las del Tecnyconta por falta de calidad y, las del Barcelona, por las lesiones.

Por sus trayectorias durante la temporada, este es un duelo de urgencias para ambos equipos, aunque el Tecnyconta tiene mucho más a perder que a ganar. El descenso acecha tanto que es una realidad y solo los triunfos permitirán a los aragoneses salir de ahí. La necesaria reacción debe comenzar en Barcelona.