Cinco temporadas después, Zaragoza vuelve a Europa. Seguramente es lo que le corresponde por ciudad, por afición, pabellón, club... pero en el deporte, salvo que puedas comprar una plaza de Euroliga, hay que ganárselo. Es lo que hizo el Casademont Zaragoza la temporada pasada, regresar a Europa por la puerta grande, como semifinalista de la Liga Endesa. Eso le dio la opotunidad incluso de elegir competición y se inscribió en la Basketball Champions League, más atractiva en cuanto a premios pero, precisamente por eso, cada año más competitiva. Y aquí está, en su sitio y a las puertas del debut en una pista conocida, el Telekom Dome. En Bonn, la capital de la antigua República Democrática Alemana, le espera este miércoles el Telekom Baskets Bonn (20.00 horas).

El equipo de Porfirio Fisac llega a la cita pleno de moral tras haber sumado tres victorias en las cuatro primeras jornadas de Liga, aunque en las dos últimas haya exhibido un juego menos espectacular y contundente. Lo hace también con la baja indefinida de Renaldas Seibutis. El escolta lituano continúa con la recuperación de su espalda al margen del grupo y el cuerpo técnico está a la espera de que los médicos le digan cuándo puede volver a trabajar en la pista. Eso deja a Fisac sin posiblidad de rotaciones en cuanto a la convocatoria, los doce que se han sentado en los cuatro partidos de Liga serán los doce en Alemania.

Otra cosa será el reparto de minutos durante los partidos, algo que Fisac ya dejó entrever antes de comenzar la temporada y que ayer también apuntó su ayudante Sergio Lamúa. El desgaste de dos competiciones, dos partidos a la semana, y los largos viajes van a hacer mella en equipo y el segoviano puede por eso dar más cancha en según qué partidos a jugadores menos habituales. La Champions puede ser, pues, el torneo para que los más jóvenes como Javi García, Krejci y Hlinason vayan fogueándose.

La primera piedra en el camino será el Telekom Bonn, un viejo conocido del equipo aragonés, al que ya se enfrentó en dos de sus tres participaciones en la Eurocup. No consiguió ganar en el Telekom Dome. En la temporada 2013-14 perdió por 108-104 y, en la 2014-15, por 90-88 con una canasta en el último segundo. El Baskets Bonn es un clásico de Europa. De hecho, presume de ser el club alemán con más participaciones continentales, al haber disputado partidos por el viejo continente en 21 de sus 24 temporadas en la Bundesliga. Es su tercera participación en la Champions League, y en ninguna de las dos anteriores logró clasificarse para el playoff. En esta ha llegado desde la ronda previa después de eliminar al Friburgo. En las competiciones domésticas ha vivido ya situaciones de todo tipo en apenas unas semanas. El lunes venció en Múnich al Bayern en la Copa, pero el fin de semana cayó en casa ante un recién ascendido. En la Bundesliga acumula una victora y tres derrotas.

9 FICHAJES / Thomas Pach está al frente del Telekom Bonn desde este verano. El club germano se ha reforzado con algunos jugadores conocidos para el público español como Branden Frazier, procedente del San Pablo Burgos, y Benjamin Simons, del Obradoiro. Además, también ha fichado para este curso a Gabriel de Oliveira, Benjamin Lischka, Joshiko Saibou, Kotieno, Binapfl, Zimmerman y McKinney-Jones. Es decir, que ha cambiado sustancialmente su plantilla. Entre las bajas, otro viejo conocido de la afición aragonesa, Nate Linhart.

En las tres jornadas disputadas de competición local la principal aportación anotadora proviene del exterior, de Frazier (14 puntos), Bartolo (10) y Simons (9,3). Bartolo es, además, su principal reboteador con 5,3 capturas de media. Los técnicos destacan que el Bonn tiene un juego rápido, de muchas posesiones, pero promedia 79,67 puntos por partido y es el tercero que menos rebotes captura en promedio. El equipo es undécimo y el segundo con peor diferencia de puntos (-45). Los germanos están todavía en proceso de construcción después de tantas novedades este verano. Ahí es donde debe intentar pescar el Casademont Zaragoza.