Joseph Jones no ha olvidado la derrota de la primera vuelta en el Centro Insular de Deportes. Ni él ni nadie en el CAI Zaragoza. Seguramente fue la derrota más cruel, por cómo se produjo y por qué. Dice el americano que la canasta de Oliver le ha perseguido durante mucho tiempo. "Caímos con ese último tiro sobre mí. Cómo olvidarlo". Lo recuerda tan bien porque lo vivió en primera línea tras un cambio de bloqueo que dejó a su equipo tres puntos abajo a un segundo del final. No había tiempo para más, creía Gran Canaria, mientras desde el banquillo del CAI se protestaba que la cuenta atrás se había detenido demasiado cerca del cero. Los rojillos sí creían. Pero alguien anduvo con el dedo lento y ese retardo impidió que el canastón de Michael Roll, la prórroga merecida, fuese real. Nadie sabe qué hubiese ocurrido, así que solo queda el consuelo de la revancha. Se juega hoy a las 12.15 horas en el Príncipe Felipe (Aragón TV).

Dice Pedro Martínez, el técnico de los canarios, casi un mito de los banquillos ACB (debutó ante el CAI hace 24 años), que el partido no será determinante para la quinta plaza. A saber por qué exterioriza eso, porque desde luego tiene pinta de ser un partido concluyente de cara a los playoff, sea por la quinta plaza, sea por la sexta, quién sabe si por el factor cancha. El Unicaja, cuarto, solo suma una victoria más en la clasificación que el CAI, las mismas que los canarios. Así que hay una batalla evidente ahí. Si los de arriba se consideran inalcanzables, aunque el Barça no esté tan lejos, más difícil parece que Cajasol, Joventut y compañía (con tres o cuatro victorias menos si gana el CAI) sean capaces de apuntarse a la fiesta. Si acaso este Baskonia tan raro que con Odom a días es un equipo, a ratos una banda.

Es decir, que importa la victoria pero también el basketaverage. Si el CAI mantiene su tendencia, puede haber otro guateque en casa. Es la intención, desde luego, después del gran sabor de boca que dejó el choque ante el Valencia. Se ha ido Shermadini y no ha pasado nada. Es obvio que el CAI ha perdido a un extraordinario pívot. También lo es que casi nadie ha torcido el gesto con el regreso de Norel, ojito derecho de la afición caísta. Van cinco victorias consecutivas, de récord. No parece suficiente. Así lo siente el equipo, que por primera vez en la temporada advierte que ha recuperado su fortaleza pasada. Y hay ambición. Si no, escuchen a Rudez: "Sinceramente, a mí no me parece una racha tan larga".

LOS MEJORES Los precedentes hablan de un 3-1 favorable al CAI, aunque sirve de bien poco el balance entre los dos mejores clubs de baloncesto de la pasada campaña (fueron tercero y cuarto, ya se sabe cuáles fueron primero y segundo). El Herbalife se mantiene a un nivel altísimo, no obstante, en una línea sostenida en el tiempo. A Zaragoza llega con la ausencia del excaísta Nacho Martín pero con su potencial intacto. Bellas y Oliver se complementan bien en la dirección; tiene francotiradores como Hansbrough, que ya le hizo mucho daño en la primera vuelta; y fuerza en el interior, con el intimidador Tavares y la garra de Xavi Rey. Solo un dato ha estropeado el trayecto de los canarios en las últimas semanas. Se produjo hace solo siete días: derrota en casa ante el Obradoiro y solo 53 puntos anotados.