El BMW M5 CS es uno de esos coches que tienen algo especial. Cuando vemos que un BMW viene acompañado de una “M”, es más que evidente que nos encontramos ante un coche muy especial. Pero si al número identificativo de su respectiva serie le siguen las letras CS, entonces valdrá la pena dedicar algo más de tiempo para observar con detenimiento este vehículo.
Un selecto club para el que BMW recuperaba hace unos años estas siglas que resumen la denominación de Competition Sport, que ya han lucido recientemente con orgullo otros modelos como los M2, M3 y M4, y que a partir de ahora también forman parte de la oferta del carismático M5.
La berlina deportiva por excelencia, ha sabido mantenerse en lo más alto de este exclusivo mercado desde su mismo nacimiento en 1985. Un liderazgo que en BMW no se han planteado dejar. Para ello, han dado una nueva vuelta de tuerca a su M5 con el desarrollo de esta versión CS. Y es que, con tan sólo unas líneas bastaría para resumir lo que significa un coche que, gracias a su motor 4.4 de 8 cilindros turbo alimentado de 635 CV se presenta como el BMW M más potente de la historia de BMW M.
Y para gestionar este despliegue de caballería el M5 CS, la berlina alemana tira de una no menos destacable serie de recursos tecnológicos como el cambio M Steptronic de ocho velocidades con Drivelogic o el sistema de tracción integral M xDrive, que también ofrece un 2WD para ofrecer propulsión trasera pura para aquellos que se atrevan…
Con todo ello, la marca anuncia un nivel de prestaciones sobresaliente con cifras como una aceleración de 0 a 100 km/h en sólo 3,0 segundos y de 0 a 200 km/h en 10,4 segundos. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 305 km/h, mientras que el consumo homologado (WLTP) es de 11,3 litros.
Especificaciones de “carreras”En la misma línea de búsqueda de la máxima deportividad, el equipo de ingenieros de BMW M ha sometido a una estricta cura de adelgazamiento a este M5 CS cuyo peso se aligera nada menos que 70 kg respecto al del M5 Competition.
El extensivo uso de materiales ligeros en la carrocería como es el caso del capó, el faldón delantero, las carcasas de los retrovisores, el alerón trasero, el difusor trasero, la cubierta del motor M Power y el conducto/silenciador de admisión realizados en plástico reforzado con fibra de carbono, contribuyen de manera directa a esta pérdida de peso, a la vez que le dotan de una imagen de lo más personalizada.
La parte ciclo se completa con otras delicatessen como un chasis adaptado al menor peso del coche y al superior rendimiento de los neumáticos Pirelli P Zero Corsa de circuito que equipa de serie en dimensiones mixtas (275/35 R 20 delante y 285/35 R 20 en el eje posterior), en unas llantas M forjadas de 20 pulgadas con radios en “Y” en un sugerente acabado Gold Bronze, que también acompaña a los diferentes logotipos “M5 CS” situados junto a las branquias laterales y en el portón del maletero.
Los reajustado rodamientos de los cojinetes de ambos trenes y un control de la amortiguación más refinado, completan el listado de ajustes necesarios para asimilar el nivel de prestaciones del M5 CS. Un modelo de estricta producción limitada que ya está a la venta por un precio de 207.300 euros. Una cifra elevada pero que pone en valor la exclusividad de un coche que se va a convertir en un más que codiciado objeto para los coleccionistas más exigentes.
