Endesa acelerará e incrementará en un 30% sus planes inversores a 2022, hasta unos 7.500 millones de euros, si se dan las condiciones regulatorias para ello, anunció el consejero delegado de la compañía, José Bogas.

En su participación en la cumbre empresarial organizada por la patronal CEOE para afrontar la salida a la crisis provocada por el coronavirus, Bogas afirmó que una aceleración del 30% en la ejecución del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) en el 2021 y 2022 supondría un incremento anual del PIB de más de 5.000 millones de euros adicionales y una creación de más 67.000 empleos anuales adicionales.

Así, consideró que la respuesta del sector eléctrico a la crisis provocada por la pandemia del Covid-19 "pasa por adelantar las inversiones" del PNIEC.

El directivo señaló que gran parte del esfuerzo inversor del grupo, unos 5.000 millones de euros, se focalizará en la descarbonización para acelerar el ritmo de la instalación de capacidad renovable; así como para incrementar y acelerar las inversiones en transición justa, incluyendo repotenciación o nuevas conexiones renovables.

Otros 2.000 millones de euros se centrarán en el área de distribución, incrementando inversiones en desarrollo, renovación, resiliencia y digitalización de la red, y los restantes 500 millones de euros en electrificación y eficiencia energética, con una inversión directa en movilidad, hogar, administraciones públicas e industria, añadió.

Más de 12.000 empleos

Con este plan de aceleración de inversiones, la compañía llegaría a generar más de 12.000 empleos directos e indirectos y de cerca de 27.000 empleos inducidos en España durante cada uno de los años 2021 y 2022, dijo el consejero delegado de la eléctrica.

Bogas subrayó que medio ambiente y economía "son complementarios", por lo que advirtió de que "no habrá desarrollo económico si no es sostenible".

El directivo, que advirtió de la necesidad de "no subir impuestos por su efecto negativo" en el tejido empresarial y de "no revertir" las reformas estructurales acometidas durante la anterior crisis y que han funcionado, apuntó la obligación de continuar "las inversiones en transición energética para favorecer la progresiva descarbonización y fomentar las energías renovables y la eficiencia energética", así como incentivar la digitalización, que ha sido "un factor esencial" durante la crisis.