Las instalaciones científicas y los laboratorios de investigación de la Universidad de Zaragoza van recuperando de manera progresiva la actividad presencial, aunque en algunos casos la situación «ha obligado» a establecer turnos de trabajo para garantizar la distancia social entre los empleados y los aforos se han reducido al 50%.

Si bien es cierto que lo «prioritario» para la comunidad científica y el campus en general sigue siendo la actividad telemática o mediante videoconferencia, hay situaciones que requieren acudir a la instalación. «Se necesita hacer experimentación en el laboratorio y para ello las garantías sanitarias son indispensables. Por eso en algunos casos se ha tenido que optar por la rotación de personas, establecido por cada director de grupo de investigación, para garantizar las distancias», explicó ayer a este diario la vicerrectora de Política Científica, Blanca Ros. «Ya en la fase 1 pudieron abrir y eso supuso un gran cambio, pero conforme han avanzado las semanas se ha vuelto a la normalidad dentro esta otra normalidad a la que todos vamos regresando», dijo.

En cualquier caso, «la divulgación no ha parado» en estos meses, ya que se han seguido editando y publicando artículos, pero lo cierto es que «había ganas» de volver a las instalaciones. Tampoco ha cesado totalmente la actividad en ningún momento, ya que muchos laboratorios han colaborado con sus equipamientos a desarrollar líneas de trabajo relacionadas con el coronavirus. «Es llamativo y un orgullo ver como los investigadores de la Universidad de Zaragoza han sabido ver como su experiencia les permitía estar en condiciones de abordar investigaciones relacionadas con el covid. Ya no solo en los laboratorios o institutos propiamente dichos, sino también en otros centros. La transversalidad para abordar trabajos es muy interesante», dijo Ros.

Actualmente, hay algunos equipos que continúa con esas líneas de innovación relativas al coronavirus, mientras que «la mayoría» han retomado de nuevo los trabajos que dejaron aparcados en los últimos meses. En este sentido, hay proyectos nacionales y europeos que han prorrogado la duración dada la situación.

En cuanto a la actividad en general en la Universidad de Zaragoza, solo un 6% de las unidades del campus realiza el trabajo en modalidad totalmente presencial y otro 6% lo hace mediante teletrabajo. La opción mayoritaria, desarrollada por un 51% de los empleados, es la alternancia del trabajo a distancia, el presencial y la rotación, mientras que el 37% restante opta por combinar el teletrabajo y la asistencia su puesto.

Las obras de Filosofía «van por buen camino»

Por otro lado, las obras de la Facultad de Filosofía «van por muy buen camino», según señalaron ayer fuentes del campus. Así, continúan los trabajos de cimentación del edificio nuevo y se espera que «a finales de semana» estarán ejecutadas ya tres cuartas partes. Además, se ha iniciado la excavación de pozos canadienses en el exterior y en el edificio antiguo se están terminando los trabajos de pilares metálicos existentes. También continúa la perforación de pozo de captación.