El Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno de Aragón ha aprobado este martes un nuevo protocolo para proteger a ancianos y personas con discapacidad de la covid-19, que incluye el cierre de los hogares de mayores y la limitación de los paseos en las residencias al interior del recinto.

Este protocolo, publicado en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) esta misma mañana, sustituye el emitido hace justo una semana y es de obligado cumplimiento en las zonas que se encuentran en fase 2 flexibilizada -las comarcas de La Litera, Cinca Medio, Bajo Cinca, Bajo Aragón-Caspe, la comarca central de Zaragoza y las ciudades de Huesca y Barbastro-, ha informado el Gobierno autonómico en un comunicado.

Entre las novedades destaca que los residentes de centros de mayores o de discapacitados no podrán realizar paseos fuera del centro (salvo que existan razones médicas que así lo aconsejen), que deberán ser ahora de una hora de duración máximo, dentro de los recintos y siempre con mascarilla.

Se mantienen las visitas de un familiar, con una hora de duración, preferiblemente en el exterior, con cita previa y cumpliendo todas las medidas de higiene y seguridad que indican los protocolos vigentes.

El número de visitas semanales dependerá de la organización del centro y las personas que acaben de ingresar o regresen a él tras una temporada fuera no podrán recibir estas visitas en el plazo de 10 días, si bien su familia tendrá información puntual sobre su estado.

Por otro lado, el Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales ha decidido dar marcha atrás en la prohibición de las salidas de los residentes para pasar unos días con su familia, puesto que valora que no hay un número significativo de brotes en las residencias aragonesas y el bienestar emocional que produce esta medida.

De este modo, aquellos residentes sin síntomas y que no hayan tenido contacto estrecho con personas sospechosas de tener la enfermedad podrán salir del centro a visitar a sus familias, pero estas salidas no podrán ser inferiores a un mes de duración.

Estas personas tendrán la plaza reservada y al regreso deberán realizarse un test para ratificar que son negativo en coronavirus y, en caso de que sea necesario, pasar diez días de aislamiento.

En el caso de las personas con discapacidad, el tiempo mínimo de salida (con los mismos requisitos) será de 15 días y en ambos casos solo estarán exentas de aislamiento las personas que den negativo en una prueba serológica de alto rendimiento.

En la norma publicada este martes se indica también que los hogares de mayores no pueden ir abriendo sus puertas progresivamente como se había contemplado.

De hecho, únicamente se podrán mantener los programas de envejecimiento activo o comida a domicilio, así como los servicios de fisioterapia, peluquería o podología, previa petición de cita y con estrictas medidas de control.

En cuanto a los centros de día, se cierran aquellos que estén ubicados dentro de residencias y se les da un plazo de tres días para acatar la medida.

Los que se encuentran fuera de residencias, en un espacio propio, pueden mantener los servicios que prestaban hasta ahora y los que llevan más tiempo en fase 2 pueden mantener los servicios básicos de fisioterapia, terapia ocupacional o podología que ya realizaban.

Por último, esta orden permite que se sigan produciendo nuevos ingresos en los centros residenciales de Aragón -desde que se autorizara a finales de mayo se han admitido un total de 540 nuevos residentes en toda la comunidad-.

En estos momentos, en Aragón, hay seis clusters con brotes "abiertos", de los cuales cuatro están activos (con el último caso notificado hace menos de 14 días)