Aragón comunicó este martes 554 nuevos casos de coronavirus. Son 43 más que el día anterior, pero la cifra parece confirmar que la comunidad ha entrado en una fase de estabilización de la pandemia y que la curva de contagios está ya en fase de meseta. La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, afirmó que parece que el pico de la ola ya ha pasado y que el objetivo ahora es que los casos de covid desciendan y lo hagan a la mayor velocidad posible, según explicó también el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo. En la comunidad, la incidencia acumulada es de 380 casos por cada 100.000 habitantes, algo menor que en el conjunto de España, que se sitúa en los 419 casos.

A pesar de todo, los indicadores que miden la incidencia de la pandemia siguen siendo alarmantes, puesto que aunque la comunidad está resistiendo mejor que otras autonomías este nuevo enviste del coronavirus, la tasa de positividad (un 17,85% en los últimos siete días) o el grado de ocupación de las uci (el 36,87% de las plazas las tienen pacientes covid) siguen siendo preocupante. Por contra, el índice reproductivo básico, que mide la capacidad de los contagios de multiplicarse, ha bajado del uno (está al 0,98), lo que quiere decir que por cada caso positivo solo surgirán 0,98 nuevos, por lo que se espera que los contagios bajen en las próximas semanas. El objetivo, ahora, es salvar del colapso a los centros sanitarios.

Desde la Dirección General de Asistencia Sanitaria, su responsable, José María Abad, reconoció que el sistema todavía se encuentra en una situación de gran presión asistencial. Según afirmó, la Atención Primaria recibe 450 casos sospechosos diarios en consultas y se rastrean alrededor de 2.000 contactos diarios.

Los servicios de Urgencias de Aragón, asimismo, registran entre 150-200 casos diarios y en el caso de hospitalización todavía presenta cifras de ocupación «preocupantes», de entre 50-70 ingresos diarios, lo que supone el 30-35% del total de casos que llegan a estos centros. La previsión es que la el momento de mayor presión en la Atención Primaria ya haya pasado pero Abad explicó que los ingresos, tanto en planta como en unidades de cuidados intensivos, sigan creciendo.

Uno de los problemas ahora es también es que, en esta época del año aumentan también las visitas y los ingresos de pacientes con otras patologías no covid, como enfermos crónicos que en invierno sufren más de sus dolencias. «La ocupación es preocupante y el número de ingresos en uci se mantendrá esta semana y seguramente también la siguiente», aseguró Abad.

Transmisión comunitaria

Los responsables del departamento explicaron también que los contagios que se detectan están «muy ligados» a relaciones sociales en el ámbito privado y público que «hay que evitar en la medida de lo posible» con el fin de llegar al umbral más bajo posible de contagios. La transmisión en estos momentos es comunitaria en las tres provincias aragonesas, pero hay una diferencia con respecto a olas anteriores: la situación de Zaragoza, que aglutina a la mitad de la población en la comunidad, es favorable y sus datos de contagiados, en descenso, están ayudando que la incidencia baje en todo el territorio aragonés. «No deberíamos tener muchos casos más a nivel general, aunque haya días concretos en los que sí que aumenten los datos», explicó Falo también.

Repollés asumió que el descenso actual se debe a las medidas que se tomaron a principios de año y hace diez días, cuando se confinaron perimetralmente Huesca, Zaragoza, Teruel y otras ciudades aragonesas. En cuanto a las cifras de muertos, el número de personas fallecidas por covid-19 se eleva ya a 2.920 en la comunidad, once más de las que figuraban en el portal el día anterior, siete notificadas en las últimas 24 horas. La tasa de letalidad por covid-19 se mantiene en el 3,10 % y la de mortalidad por cada 10.000 habitantes se eleva al 22,2 %.

Respecto a las críticas por la paralización del cribado del cáncer de colon debido a la pandemia, Abad recordó también que se reinició el pasado mes de diciembre y que las nuevas zonas de salud se incorporan de forma progresiva. «Es un planteamiento que no se ha parado», ha asegurado el director general de Asistencia Sanitaria, quien ha precisado que esta reintroducción tras la paralización que implicó la primera ola de la pandemia se hace de forma progresiva igual que se hizo cuando se puso en marcha el programa.