El Departamento aragonés de Ciudadanía y Derechos Sociales está elaborando un listado con el personal de los servicios de ayuda a domicilio que atienden a mayores y dependientes para incluirlos en los grupos prioritarios de vacunación.

Según ha explicado este martes la consejera del ramo, Mariví Broto, tras iniciar la segunda ronda de vacunación en la residencia Romareda de Zaragoza, el Gobierno solicitó el día 11 a las empresas y servicios sociales de base -ayuntamientos y comarcas- que comunicaran qué empleados quieren vacunarse para organizar su administración, al igual que se hizo con las residencias.

De esta manera, la plantilla que presta este servicio a personas "muy vulnerables", ha indicado Broto, pasa a formar parte de los grupos prioritarios en la estrategia de vacunación, junto con los grandes dependientes que viven en sus domicilios y los mayores de 80 años.

Sobre los 2.300 trabajadores de residencias que han rechazado inmunizarse contra el covid-19, Broto ha recordado que otros 10.000 han dicho que sí y que unos 200 que en un principio dijeron que no, finalmente han accedido.

En este sentido, la consejera ha resaltado que vacunarse es "una muestra de responsabilidad" y ha vuelto a mostrarse partidaria de en un futuro exigir la vacuna para trabajar en centros del IASS, al igual que, ha explicado, a un residente se le exige una PCR negativa para volver a entrar al centro tras un periodo fuera.

No obstante, la titular de Derechos Sociales ha pedido que no se menosprecie a un sector, el de los trabajadores sociosanitarios, que han sido "verdaderos héroes" esta pandemia.

"No se trata de culpabilizar, sino de convencer", ha remarcado la consejera.

Aragón comenzó este lunes la segunda ronda de vacunación contra el covid-19 en la residencia de Somontano de Barbastro (Huesca) con 231 inmunizaciones, a las que hay que sumar los 165 residentes y 8 trabajadores del centro del IASS Romareda de Zaragoza a los que se ha inoculado este martes la segunda dosis de Pfizer.

Para Broto, este día supone "el inicio de la esperanza" que empezó el 27 de diciembre, con las primeras dosis, pero "no el final del drama del covid", por lo que ha llamado a la sociedad a no bajar la guardia.

Aragón prevé obtener esta semana la inmunización completa en 2.000 personas de 50 centros residenciales mientras continúa con la administración del primer pinchazo, que han recibido ya 13.725 residentes y 8.295 trabajadores sociosanitarios y que está a punto de completarse, en otras 57 residencias.

A pesar de haber recibido menos viales de Pfizer, la Comunidad prevé vacunar esta semana a más de 15.800 personas contra la covid-19, incluyendo a personal sanitario de Atención Primaria y Especializada.