El Gobierno de Zaragoza va a destinar 10 millones para ayudar a autónomos y pequeñas empresas, golpeadas por la crisis del coronavirus. Lo va a hacer a través de un plan de microcréditos que ha obligado a dejar sin presupuesto proyectos de gran calado para poder financiarlo, como la siempre olvidada reforma de la avenida Cataluña, la mejora de la iluminación de parque Pignatelli, la reparación del puente de Cogullada o el de smartcity (ciudades inteligentes).

El alcalde, Jorge Azcón, ha reunido esta mañana a los agentes sociales, económicos y vecinales, además de a los grupos municipales, para presentar este plan que dispone de 10 millones y que pretende dotar de liquidez a los autónomos y pymes. Y lo hará, ha querido recalcar, haciendo «un gran esfuerzo» ya que a día de hoy el consistorio sin recibir fondos estatales para afrontar la crisis del covid.

Los créditos, con un 0% de interés, podrán solicitarse este mes de julio para poder recibir la cuantía aprobada en septiembre, que oscilará entre los 5.000 y los 10.000 euros con un periodo de carencia de seis meses y con cinco años para poder devolverlo. Se prevé que alrededor de 1.200 empresas podrán beneficiarse.

El gran esfuerzo del que hablaba el alcalde tiene que ver con todas los proyectos que se quedan en el tintero para años futuros. Para poder financiar los microcréditos ha sido necesario obtener el dinero de otras partidas que, según ha explicado la vicealcaldesa, Sara Fernández, no iban a poder ejecutarse este año.

CRÍTICAS / La selección de proyectos fue cuestionada por la oposición. Después de que en el último pleno PP, Cs y Vox aprobasen la modificación de créditos, ayer el portavoz de ZeC, Pedro Santisteve, criticó que haya partidas «que servirían para generan empleo, como la inversión en la avenida Cataluña, las obras del parque Torre Ramona, la iluminación del parque Pignatelli o las inversiones en zonas verdes». En la misma línea fueron las palabras de la portavoz del PSOE, Lola Ranera. «Lo primero que hace este Gobierno es aprobar una modificación que quita dinero a los vecinos y da la espalda a los barrios. El objetivo del acuerdo por el futuro es salvar a los ciudadanos», declaró, muy crítica con la decisión de aparcar los planes de rehabilitación o vivienda. También Podemos denunció esta selección que, según su concejal Fernando Rivarés, ataca a obras «históricamente reivindicadas» .