Agentes de Policía Nacional han detenido durante el fin de semana en Zaragoza a cinco personas por burlar de forma reiterada el confinamiento acordado en el decreto de estado de alarma en vigor, una de ellas hasta en siete ocasiones.

Según informa la Dirección General de Policía, la primera detención se produjo sobre las 16.00 horas del sábado pasado en la calle Escoriaza y Fabro de la capital aragonesa, al detectar una patrulla a un hombre sancionado en siete ocasiones y que solía dar identidades falsas.

A pesar de residir en un punto alejado, en la calle Las Armas, el presunto infractor, M.A.N., de 30 años, manifestó que iba a comprar a un supermercado, pero en el momento de ser identificado los agentes pudieron comprobar que tenía antecedentes penales por desobediencia, además de constarle una requisitoria por un robo con violencia e intimidación.

Sobre las 22.00 horas de la misma jornada, otra patrulla policial interceptó a un joven que circulaba en bicicleta por la calle Unceta y que manifestó que se iba a comprar tabaco.

Unos minutos después, el joven, M.B., de 26 años y con antecedentes, fue avistado en la calle Padre Manjón, por lo que fue denunciado por incumplir el estado de alarma, pero finalmente, sobre las 23.30 horas, fue detenido al ser localizado cuando circulaba por la avenida de Madrid en dirección contraria a su domicilio.

Ya en dependencias policiales, los agentes comprobaron que este joven había sido propuesto para sanción en siete ocasiones en las últimas dos semanas, y que la bicicleta que portaba había sido robada el pasado mes de enero.

Durante la jornada del pasado domingo, 5 de abril, sobre las 01.30 horas, un patrulla policial de servicio para vigilar el cumplimiento de la medida de confinamiento solicitó a un hombre que deambulaba por la calle Diputados que se identificara.

Tras hacer caso omiso a los agentes en varias ocasiones, el supuesto infractor, U.C. de 38 años y con antecedentes, sacó del bolsillo su pasaporte y lo tiró al suelo al tiempo que escupía y gritaba de forma amenazante.

Después de advertirle de forma insistente que debía estar en su domicilio, los agentes procedieron finalmente a detenerle por presuntos delitos de resistencia y desobediencia a la autoridad.

Alrededor de las 16.00 horas de la misma jornada, unos agentes de servicio en la plaza de Santo Domingo inquirieron a una pareja, un joven y una menor de edad, por los motivos por los que se encontraban lejos de su domicilio.

A pesar de que los establecimientos se encontraban cerrados al ser domingo, la pareja afirmó que iba a un supermercado en concreto de la zona a comprar.

Al ser informados de que no podían estar en la calle, el joven, H.K., de 19 años, con antecedentes policiales y propuesto para sanción por incumplir el confinamiento hasta en tres ocasiones anteriores, se negó en reiteradas ocasiones a abandonar el lugar, por lo que fue detenido.

La menor fue acompañada por los agentes hasta su domicilio familiar para ser puesta bajo la custodia de su padre.

Finalmente, sobre las 23.35 horas de la misma jornada, una patrulla que se encontraba de servicio en la calle San Pablo reconoció a un hombre de 41 años que había sido denunciado en cinco ocasiones anteriores por burlar el confinamiento.

Al hacer caso omiso a las indicaciones dadas para que regresara a su domicilio, el presunto infractor, H.R., fue detenido y conducido a dependencias policiales.

Los detenidos fueron puestos a disposición de los juzgados de guardia de la capital aragonesa por presuntos delitos de desobediencia.