La vicealcaldesa y consejera municipal de Cultura y Proyección Exterior del Ayuntamiento de Zaragoza, Sara Fernández, ha cifrado en más de 4 millones de euros las pérdidas directas en la ciudad por la cancelación de congresos y la suspensión de la celebración de la Semana Santa debido al confinamiento decretado por el estado de alarma para evitar propagar el coronavirus.

Sara Fernández ha precisado que estas pérdidas se han calculado en el mes que comprende desde que se decreta el estado de alarma, a mediados de marzo, hasta pasada la Semana Santa, en la segunda semana de abril.

En una entrevista concedida a Europa Press, Sara Fernández, ha indicado que de los 49 congresos previstos este año, 5 se han aplazado y otros dos se celebrarán de forma virtual. El resto no tienen fecha de celebración o se han anulado.

De todo el montante, la mayor parte, cerca de 3 millones de euros, correspondería a la Semana Santa, pero sin incluir el gasto de los ciudadanos, ya que algunos estudios lo cifran en 20 millones de euros. Precisamente, esta celebración es el segundo evento anual que mas retorno económico supone para la ciudad, después de las fiestas del Pilar, que en 2017 fue de casi 65 millones de euros.

El coronavirus ha supuesto que la hostelería y restauración haya parado su actividad con las consiguientes pérdidas económicas, lo que ha llevado al Ayuntamiento de Zaragoza a aprobar varias medidas fiscales, que les eximen del pago de tasas durante mes y medio y el aplazamiento del 50 por ciento del IBI al 15 de julio, entre otras. Asimismo, se han creado plataformas e iniciativas online para dar apoyo a la hostelería este tiempo de cierre de actividad.

Sara Fernández ha señalado que para cuando se reinicie la actividad se trabaja en varios escenarios, pero "todo depende" de las medidas de las autoridades sanitarias y del marco jurídico y económico que marquen los Gobiernos de España y Aragón. "En función de las ayudas económica se hará una cosa u otra".

COORDINACIÓN

Al respecto, ha avanzado que las ideas que se barajan oscilan entre las subvenciones y ayudas a la adopción de medidas fiscales para que vuelvan a generar actividad y su programación las empresas culturales en cuanto se pueda.

Sara Fernández ha defendido hacer contrataciones a empresas del ámbito cultural de Zaragoza que les permita reactivarse en las celebraciones que se puedan hacer en la calle --si se autorizan-- "porque mueven mucho tanto el sector de la hostelería como del turismo".

La vicealcaldesa ha subrayado que las ayudas fiscales que se acuerden y las ayudas para generar actividad se adoptarán con la colaboración del sector afectado y con otras instituciones.

Al respecto, ha contado que se ha mantenido contactos tanto con el consejero de Educación y Cultura del Gobierno de Aragón, como con la diputada de Cultura de la Diputación de Zaragoza, Ros Cihuelo. "La finalidad es sacar medias coordinadas, que podamos cubrir entre todos y sin duplicidades ni incompatibilidades. Tenemos clara la voluntad de ayudar".

VIRTUAL VS PRESENCIAL

Mientras llega ese momento de volver a programar en salas y en la calle, Sara Fernández ha reconocido que la oferta cultural será más virtual que física.

A colación ha elogiado el "gran eco" que han tenido las actividades culturales programadas en Internet por el Ayuntamiento de Zaragoza y que "han creado afición" con los más de 1,5 millones de impactos en las redes sociales de los contenidos de '@ZgzCultura'. "Ha sido una forma de enganchar a los ciudadanos y seguro que, el día de mañana, sentirán interés por conocer 'in situ' los museos y los espacios relacionados con las propuestas culturales.

Sobre el Festival Iberoamericano de Cultura Musical 'Vive Latino', programado para los días 11 y 12 de septiembre, ha dicho que "todo está a la espera porque la pandemia puede afectar a todo. Habrá que hacer lo que digan las autoridades sanitarias".

Finalmente, ha asegurado que correrá a cargo del área de Cultura el coste del hospital de campaña que se ha levantado en la sala multiusos del Auditorio de Zaragoza con 108 camas como refuerzo a los hospitales de la ciudad ante la pandemia.

"Cuando se levante se podrán ver las afecciones porque en el suelo han tenido que perforar más de cien agujeros para anclar la estructura. Entonces se evaluará y se podrá calcular el coste que ha supuesto", ha concluido.