El inicio, hoy lunes, de la fase 1 del plan de desescalada del coronavirus, en el que se incluyen las tres provincias aragonesas, va a permitir que algunos sectores culturales comiencen a ponerse en marcha de forma gradual después de casi dos meses de parálisis total de la actividad. En general, la orden publicada el sábado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) señala que los establecimientos destinados a actos y espectáculos culturales, «sean abiertos o al aire libre», podrán reabrir con un tercio de su aforo. En lugares cerrados no podrá haber más de 30 personas en total; al aire libre, el aforo máximo será de 200 personas. Afecta a espectáculos culturales, librerías, museos, bibliotecas y rodajes, entre otras actividades, aunque no todas están dispuestas a comenzar ya bien por precaución ante la seguridad de los usuarios, bien por la escasa rentabilidad, por no decir acumulación de perdidas, o por la dificultad de poner en marcha una programación con las actuales restricciones.

GALERÍAS DE ARTE

Prácticamente todas las galerías de arte aragonesas abrirán sus puertas el martes (los lunes, como los museos, son fiesta en las galerías), ateniéndose a las limitaciones de aforo y las medidas de seguridad, que incluyen la oferta a los visitantes de mascarillas y guantes. Las cuatro galerías que siguen perteneciendo a la ahora escindida Asociación de Galerías de Arte Contemporáneo de Aragón (La Carbonería de Huesca y las zaragozanas A del Arte, La casa Amarilla y Antonia Puyó) tienen claro que abrir no solo es una necesidad comercial, sino un compromiso ético con el mundo de al cultura. «Nosotros lo tomamos como una forma de empujar la actividad cultural de la ciudad, un intento de volver a cierta normalidad, que el público tenga una oferta de arte contemporáneo y pueda ver exposiciones ya que, por ejemplo, la mayoría de los museos y salas de arte públicas no van a abrir», señala Mariano Santander, de A de Arte, que mantiene en su programa la exposición Antihéroes, de Víctor Mira, con la que le cogió el confinamiento.

En el mismo sentido se manifiesta Chus Tudelilla, de La Casa Amarilla, quien recalca que la apertura de la mayoría del sector frente al retraso en la apertura de puertas de museos y otro tipo de salas institucionales «muestra el importante papel que juegan las galerías a la hora de ofertar cultura, ya que desde el principio hemos sentido esa responsabilidad de ofrecer cultura más allá del apartado comercial, pues a una galería entra quien va a comprar y quien no lo hace, que son la mayoría, y además mostramos obra de autores actuales y vivos, que también están necesitados con esta crisis». La Casa Amarilla mantiene también la exposición de Louisa Holecz que quedó varada con el confinamiento y que mantendrá hasta el 14 de junio para sustituirla por un singular proyecto de María Gimeno, «que es una tela en la que ha ido cosiendo sus emociones y cuyo objetivo es provocar en los visitantes una reflexión de lo que está pasando», dice Tudelilla.

Ambos, Mariano Santander y Chus Tudelilla reconocen que la apertura de las galerías de arte puede ser más fácil que otros establecimientos culturales, «pues desgraciadamente no se suelen dar aglomeraciones de público, por lo que es fácil mantener las distancias», dice Santander, quien explica que además de los geles, mascarillas y guantes «vamos a quitar una cortina que separaba visualmente un espacio de la muestra y dejar todo diáfano».

También, como en A del Arte, Víctor Mira es el protagonista en la reapertura de otra sala zaragozana, la de Cristina Marín, mientras Kafell mantiene a Óscar Seco y Antonia Puyó a Cecilia de Val. Por su parte, Julio Álvarez, de la galería de fotografía Spectrum-Sotos no tiene previsto abrir «hasta que no pueda hacerlo la escuela que tenemos y que no sé si podrá ser en junio o tendremos que dejarlo ya para septiembre», dice.

LIBRERÍAS

Las librerías, al igual que algunas galerías que ya abrieron la semana pasada para expender los pedidos virtuales que habían recibido durante el confinamiento, llevan toda fase 0 adaptando sus establecimientos a las normas para abrir hoy mismo con todas las precauciones exigidas para cumplir las normas, y han instalado pantallas en los mostradores, geles, guantes y mascarillas. Así, pueden desde hoy prestar servicio sin cita previa, como era obligatorio en la fase 0, pero siempre con el 30% del aforo y con atención prioritaria para los mayores de 65 años. Un ejemplo de cómo se han organizado las medidas lo da la librería La Pantera Rossa, que explica en un comunicado: «Recuperamos la venta presencial y por Internet. Nuestros horarios serán los habituales. En horario de 10 a 12 y de 19 a 20 recibirán atención preferente (no exclusiva) las personas mayores de 65 años (haremos coincidir estos horarios con las horas permitidas para su salida a la calle). Además, las mujeres embarazadas, las personas acompañadas de menores de 3 años o con movilidad reducida serán atendidas primero». Y continúa: «Hemos preparado las medidas de protección sanitaria exigidas, o recomendadas para la ocasión. En la entrada del local situaremos las instrucciones y materiales básicos»

Todo está dispuesto pues para que pueda retomarse la actividad en un sector que se ha visto seriamente castigado al haber coincidido la pandemia con algunas de las fechas más importantes de su calendario, como son la fiesta del Día del Libro, el 23 de abril, o las distintas Ferias del Libro que se celebran entre los meses de mayo y junio y que han tenido que ser pospuestas al otoño.

BIBLIOTECAS

El personal de la Administración se incorpora hoy al trabajo con lo que las bibliotecas de titularidad pública podrán abrir desde hoy pero con una serie de requisitos, pues el BOE del sábado también establece normas para las actividades de préstamo y devolución de obras en las bibliotecas, que solo podrán funcionar, como todo lo demás, al 30% de su aforo. Una vez consultadas estas obras, se depositarán en un lugar apartado y separadas entre sí. Entonces permanecerán en cuarentena durante al menos 14 días. Las bibliotecas dependientes de otras instituciones también pueden abrir, pero cada una marcará los plazos que considere adecuados.

MUSEOS Y SALAS DE ARTE

Como ya explicábamos ayer en este diario, tan solo el Museo de Teruel tiene previsto abrir mañana martes, ya que tiene todos los requisitos para hacerlo. El resto de los grandes museos aragoneses emplearán los próximos días en adaptar sus dependencias para poder abrir la mayoría de ellos ya en el mes de junio. A lo largo de la semana o la que viene podrían estar adecuados para recibir al público los centros etnográficos del Parque Grande de Zaragoza, el centro del yacimiento de Celsa, en Velilla de Ebro y pequeños museos de otras localidades. Tampoco las salas de exposiciones municipales de Zaragoza, o el Paraninfo, donde se expone la obra de Enrique Larroy, tienen previsto abrir por el momento.

TEATRO, CINE Y MÚSICA

Los cines y teatros, según las primeras indicaciones del Gobierno, no se abrirían hasta la fase 2. Sin embargo, en el BOE del sábado se permite la reapertura de todos los locales en los que se desarrollen actos y espectáculo culturales. Podrán abrir sus puertas siempre que no superen un tercio del aforo autorizado. Y eso sí, en lugares cerrados no podrá haber más de 30 personas y al aire libre, 200 personas. Por ello ni el teatro, ni el cine ni la música están por la labor de comenzar ya. De hecho, por ejemplo, ningún cine de tienen colgadas películas para estos días en la publicidad de sus carteleras en Internet.

Los teatros tampoco están por abrir con estas restricciones, pues no resulta rentable con los gastos que conlleva. Los teatros públicos podrían abrir entre julio y agosto o dejarlo ya para la siguiente temporada, como prácticamente lo tienen decidido los teatros privados y poder regresar así con el aforo completo.

Tampoco las salas de música tienen intención de abrir ahora. Chema Fernández, programador de La casa del loco, estima que se podrán ir haciendo conciertos en salas «a partir de la tercera fase y de una forma escalonada, más bien a mediados de junio, pues alguno se animará a hacer pequeños conciertos si ya se admite un 50% del aforo. La normalidad ya será en septiembre», estima.

Y Sergio Vinadé, gerente de Las Armas, asegura que «no tenemos claro cuando abriremos; podríamos abrir la terraza ahora, pero no nos compensa. De momento esperamos, y los conciertos de momento ni nos lo hemos planteado», concluye.