Las instituciones del país emprenden esta semana un desconfinamiento progresivo de su actividad parlamentaria y retoman parte de su dinámica habitual con plenos aminorados, un formato que ha permitido al Congreso de los Diputados reducir marchas pero seguir en funcionamiento pese al coronavirus. Los senadores volverán a ocupar este martes sus asientos después de más de un mes de inactividad en una sesión de control al Gobierno.
El único pleno que ha celebrado el Senado desde el 14 de marzo fue a distancia y duró apenas dos minutos, el tiempo necesario para aprobar un procotolo internacional sobre la adhesión de Macedonia del Norte a la OTAN, que estaba ratificado por todos los países miembros, salvo España. El Congreso de los Diputados sí ha continuado con actividad presencial, eso sí, cumpliendo con las estrictas restricciones sanitarias. Este miércoles volverá a comparecer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para informar sobre el Consejo Europeo y recabar el apoyo para alargar el confinamiento hasta el 9 de mayo.
Fiscalización
La vuelta al hemiciclo del Senado se realiza con una sesión de control al Gobierno sin la presencia de Sánchez por "cuestiones de agenda". Su ausencia ya ha levantado las críticas de la oposición, que considera mermada su capacidad de fiscalización, y que obligará al vicepresidente Pablo Iglesias a responder al interrogatorio de quince preguntas de los grupos.
La Mesa del Senado pidió a los representantes políticos que limitaran los desplazamientos y que primaran la presencia de los residentes en la ciudad de Madrid para garantizar la distancia social requerida y no conjurar a más de un diez por ciento de los representantes por partido. Asimismo, la Cámara Alta redactó un justificante para los que deban trasladarse obligadamente al pleno. La sesión se prevé tensa porque los grupos inquirirán en la gestión del Gobierno sobre la crisis y en las consecuencias socioeconómicas que acarrea.
Tras este primer 'round', el Senado acogerá el 30 de abril una reunión de la Comisión General de las Comunidades Autónomas, que preside el expresidente de la Cámara Alta, Manuel Cruz, que medirá el entendimiento y la coordinación del Gobierno con las regiones. El PP ya ha exigido a Sánchez que en esta ocasión no plante a los senadores.
