Jon Ander Felipe y Manu Molina, jugadores de la SD Ejea de Segunda División B, han permanecido todo el día en su casa, aunque finalmente no se ha tratado de un caso de coronavirus. "Pasé mala noche con algo de fiebre y dolor de garganta y llamé al 061 a título personal pero para curarme de unas anginas. Avisé al entrenador porque también se las podía haber pegado a Manu", aseguró el guardameta, que espera reincorporarse en breve a la dinámica del equipo. Al final, se trata de un caso de anginas. Eso sí, tras el encuentro con el Valencia Mestalla, el meta se desplazó a Bilbao. Por su parte, Manu Molina se encuentra bien.

Hasta este miércoles estuvieron entrenando ambos jugadores con el resto de la plantilla con total normalidad. Desde el Ejea han estado tranquilos y convencidos de que era una falsa alarma y todo apunta que al final así ha sido.