La Policía Federal (PF) allanó este martes el Palácio das Laranjeiras, como se conoce la residencia oficial del gobernador del estado de Río de Janeiro, ocupada desde el 2019 por Wilson Witzel, en el marco de una investigación por el escandaloso desvío de recursos de la salud en medio del combate contra el covid-19. La pandemia ha matado a más de 4.000 personas e infectado a 38.000 en ese estado, convertido en uno de los focos principales de la pandemia. Según especialistas, la cifra de fallecidos y contagiados es al menos siete veces mayor y afecta especialmente a los sectores populares. La cantidad de decesos a nivel nacional está cerca de los 24.000. En ese contexto los agentes de la PF confiscaron el teléfono móvil y el ordenador de Witzel. El gobernador es tan ultraderechista como el presidente Jair Bolsonaro. Pero la relación entre ellos se ha deteriorado, especialmente desde el momento en que los hijos del mandatario quedaron salpicados por dos hechos que han tenido lugar en Río de Janeiro: el asesinato de Marielle Franco, en el 2018, y un manejo oscuro de fondos de la alcaldía.

Por eso Witzel ha considerado que la acción de la policía es un acto de venganza de su exsocio político. La operación en la residencia del gobernador fue autorizada por el ministro del Tribunal Supremo de Justicia, Benedito Gonçalve. "Felicitaciones a la PF", dijo escuetamente Bolsonaro, quien, a la par está en el centro de otra tormenta política por el manifiesto intento de interferir en las acciones de ese cuerpo para proteger a su familia.

ANUNCIO EN LAS REDES

"No hay absolutamente ninguna participación o autoría mía en ningún tipo de irregularidad en los asuntos relacionados con las quejas presentadas por el Ministerio Público Federal", dijo Witzel. El gobernador se mostró "extremadamente sorprendido e indignado" por el hecho de que la información del allanamiento fue anunciada por diputados bolsonaristas en las redes sociales antes de llevarse a cabo. "Estoy a disposición de la justicia, mis secretos están abiertos. No abandonaré mis principios y mucho menos el estado de Río de Janeiro", dijo. Los medios de comunicación recordaron que se han encontrado además documentos que implican a la primera dama, Helena Witzel, y a un empresario ligado al gobernador.