Si bien las medidas de desescalada anunciadas por Pedro Sánchez han insuflado algo de optimismo al sector cultural, lo cierto es que las condiciones impuestas para las primeras fases son «inasumibles tanto por el aforo que se marca como por la seguridad y la higiene».

«Tal y como está planteado es inviable la apertura para un teatro privado», señala María López-Insausti, presidenta de Ares y gerente del Teatro de las Esquinas: «Creemos que hay que negociar estas condiciones porque así no es posible abrir. ¿Qué hacemos, levantamos el ERTE de 47 personas? Con la taquilla de un tercio no es sostenible la apertura... Creemos que son porcentajes que hay que negociar y sobre todo que el Gobierno debe dejarnos mantener el ERTE hasta que podamos abrir al 100%. No nos vamos a plantar porque queremos negociar con el Gobierno pero asi no se puede abrir».

En la misma línea, se muestra Chema Fernández, programador de La casa del loco, una de las salas que más conciertos acoge de la comunidad: «El 95% de las salas no pueden abrir si el aforo es del 30%... Nunca hemos sido una prioridad para el Gobierno pero vemos un claro agravio comparativo con otros sectores, por ejemplo, con los lugares de culto que pueden abrir al 50%. ¿El tranvía va a estar también al 30% solo?» se pregunta un Fernández que tiene claro que «ya nos habíamos hecho a la idea de perder el verano y ya todos estamos pensando en la vuelta del verano para retomar la actividad».

«Queríamos certidumbres y nos han dado más incertidumbres», indica Esteban Villarrocha, gerente de Teatro Arbolé, que tampoco ve clara la apertura: «Nosotros somos partidarios de no abrir sin las condiciones adecuadas de seguridad y aforo. Creemos que es mejor esperar a septiembre porque, ¿qué hacemos ahora, sentamos a un niño y a su padre a tres sillas? Creo que han pecado de precipitación», explica.

Para Sergio Vinadé, de Las Armas, «esto es como darte una pistola con la bala para que aprietes el gatillo. Entendemos que hay que trabajar en una solución, por ejemplo, que si hay una restricción del aforo, nos permitan solo quitarle el ERTE al mismo porcentaje de plantilla porque así como está planteado, no es asumible para una sala».