El Chesterfield de la National League, equivalente a la Primera Catalana, jugaba este fin de semana en Dover ante 1.214 aficionados, una de las mejores entradas de la temporada. Lo hacía sin su central titular, Haydn Hollis, auto aislado por prevención con síntomas del coronavirus, y con su entrenador, John Pemberton, fuera de sí al terminar el partido con "varios jugadores encontrándose mal": "No necesitábamos ponernos en esa posición, pero lo hemos hecho. Es estúpido".

"Todos tenemos familias, tengo un padre de 81 años que vive solo y no podré visitarlo, no tiene sentido jugar", decía Pemberton. El brote de coronavirus ha alterado el calendario deportivo del mundo, pero los ingleses pudieron encontrar una alternativa este fin de semana en los partidos de la National League y en las categorías inferiores de la Non-League y el futbol amater.

Asistencias de récord

Y la asistencia aumentó considerablemente. El Maidenhead United y el Sutton United registraron las segundas más altas de la temporada. El South Shields, de una categoría más baja que la Cuarta Catalana, se enfrentó al FC United con una multitud de 3.274 personas. El partido entre el Notts County y el Eastleigh se convirtió en el más multitudinario con 4.942 asistentes.

Pero a sus protagonistas no les hizo nada de gracia. Ben Strevens, técnico del Eastleigh, acusó la liga de ser "avariciosa": "La National League simplemente se ha preocupado por el dinero, no ha pensado en la salud y el bienestar de los espectadores y de los jugadores"."Estoy convencido al 100% que a partir del lunes todos los partidos se detendrán, hay varios equipos afectados por el coronavirus". Alan Devonshire, cuyo equipo de Maidenhead United perdió en casa ante el Stockport, secundó las críticas: "El futbol es secundario, se trata de la vida de las personas, no entiendo cómo estamos jugando hoy".

A través de sendos comunicados, las diferentes divisiones defendieron la decisión de jugar "cumpliendo con los consejos del Gobierno" y directores ejecutivos como Michael Tattersall, de la National League, aseguró que "no es realmente un momento para tener una discusión, estamos manteniendo la temporada bajo constante revisión". De momento las categorías inferiores inglesas siguen con partidos este martes y miércoles.