A doce horas de que el Gobierno someta al Congreso una nueva prórroga del estado de alarma, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha comparecido en rueda de prensa este martes para hacer dos anuncios clave: una suavización del confinamiento para los niños y la fijación de un precio máximo de 96 céntimos para las mascarillas de venta en farmacias.

Illa ha anunciado que emitirá una orden el próximo sábado para que los niños menores de 14 años puedan interrumpir su confinamiento, si bien no ha aclarado aún con qué límites y en qué condiciones.

"Este es un Gobierno que escucha", ha dicho, antes de anunciar que, si el Gobierno consigue este miércoles el apoyo del Congreso para otra quincena de estado de alarma, "desde el mismo domingo los niños menores de 14 años podrán dar paseos".

Illa se ha comprometido a explicar, de aquí al próximo fin de semana, la distancia y el tiempo máximo de salida de los menores, detalles que están "trabajando con diferentes áreas del Gobierno", entre las que ha citado la vicepresidencia de Asuntos Sociales.

"No estamos en fase de desescalada, estamos en fase de confinamiento", ha advertido Illa, pero también ha subrayado que la situación "permite medidas de alivio". Tras el periodo cumplido ya de restricciones de movimiento, Illa considera que "las medidas que ha ido tomando el Gobierno han dado resultado".

Así, "hemos logrado alcanzar el pico de la curva", ha dicho, por lo que "hemos completado la primera de las tres etapas de este combate contra el Covid-19. Estamos ya en la segunda etapa". Y esa etapa tiene como objetivo "consolidar el crecicimiento bajo en número de contagios".

El PP, Vox y Ciudadanos habían pedido pública y reiteradamente al Gobierno a lo largo de esta jornada que permitiera una salida a los menores, y no solo a acompañar a sus padres a la compra. La ministra portavoz, María Jesús Montero, había adelantado este mismo martes que los niños solo podrían acompañar a sus padres en sus salidas para comprar, pero Illa ha eludido una preguna sobre si eso es muestra de descoordinación en el Ejecutivo. El decreto de prórroga que se presenta este miércoles al Congreso permite a los niños "salir a hacer ciertas cosas", ha dicho el ministro sin dar más detalles.

"El Gobierno ha actuado hasta la fecha con la máxima prudencia y lo seguiremos haciendo. Está en juego la salud pública, no debemos engañarnos; estamos en una sitaucón todavía complicada", ha explicado el titular de Sanidad.

A 96 CÉNTIMOS LA MASCARILLA

Illa ha contado que, tras haberse celebrado en la tarde de este miércoles una reunión de la Comisión de Precios de productos sanitarios, ha fijado un precio máximo de 0,96 euros para las mascarillas que se han convertido de uso común para las salidas de los ciudadanos.

El precio de venta al público fijado por el Gobierno tiene el IVA incluido y es para la venta de mascarillas básicas, también llamadas "quirúrgicas". El ministro no ha anunciado precio máximo para las mascarillas de mayor calidad de filtración, las FFP2, que reclaman los sanitarios y otros profesionales de la lucha contra la epidemia y que, en las farmacias que las sirven, se venden a un precio medio de entre 9 y 13 euros. Tampoco ha aventurado cuánto costarán las mascarillas "higiénicas" cuya fabricación propicia el Ejecutivo sobre la base de nuevos estándares del Centro Europeo de Prevención de Enfermedades.

La medida de fijación de precios "no obstaculiza que funcionen los mecanismos de mercado", ha dicho Salvador Illa, y ha advertido que "estos precios son revisables, en función de como funcione el mercado, y tienen como objetivo evitar abusos".

Sobre el uso de mascarillas, Illa ha subrayado "tres prioridades y una recomendación". Si una persona guarda la distancia "como mínimo de un metro", se lava las manos "muchas veces al día" y guarda "una higiene estricta de los espacios privados y los espacios públicos", ha dicho, "no necesita mascarilla". En el caso de que no pueda hacerlo "es recomendable" -ha enfatizado- su uso.