Como es lógico, los hoteles serán los últimos negocios dentro del sector hostelero en reactivarse. Todos ellos ya esperan que, como anunció hace unos días el Gobierno central, el turismo comience a desbloquearse a partir de julio o que, al menos, se permitan pronto los desplazamientos entre provincias. «La demanda actual es raquítica y garantizar la viabilidad de los negocios será muy difícil hasta que no se entre en la fase tres», asegura el presidente de la Confederación de Empresas de Hostelería y Turismo de Aragón, Luis Vaquer, que estima que en esta fase dos solo abrirá entre un 5% y un 10% de los hoteles.

Este ha sido el caso del hotel Plaza Feria, que este lunes ha abierto sus puertas aprovechando la reactivación de la plataforma logística, donde está su principal caladero de huéspedes. Con todo, la gran mayoría de los hoteles de la ciudad siguen cerrados (hubo algunos que permanecieron como alojamientos de emergencia y han estado siempre abiertos, como por ejemplo el Gran Vía). Vaquer confía en que cuando finalice el estado de alarma abran algo más del 30% de los hoteles de la comunidad.

Por su parte, los que ya han empezado a carburar con la llegada de la fase dos han sido los restaurantes. El sector estima que en Zaragoza ya están abiertos el 40% del total, aunque muchos seguirán esperando a la entrada de la fase tres o incluso al mes de julio. Y es que a algunos no les compensa sacar a sus trabajadores de los ERTE con una expectativa de negocio tan poco fiable.

«Nosotros abrimos este próximo sábado, pero aún tendremos que dejar a un empleado en ERTE porque hay mucha incertidumbre», reconoe Ana María Pimpinela, propietaria del restaurante Punto y Seguido, en el barrio de La Jota. En su calle hay cuatro establecimientos y por el momento solo ha abierto uno. «Ya estamos preparados con las mamparas y todas las medidas de seguridad; ahora tenemos que confiar en nuestra clientela», indica Pimpinela, que entre semana da casi 15 comidas al día y unas 40 los fines de semana.

Los locales de banquetes y ceremonias han sido otros de los grandes damnificados. Lo saben bien en el restaurante Gayarre. «Ahora tenemos más certezas y confiamos en que en los próximos meses podremos celebrar una parte de los eventos que se suspendieron», aseguran desde el restaurante.

Actualmente, se estima que más de 27.000 empleos dependen de la hostelería en la provincia de Zaragoza, que cuenta con más de 5.000 establecimientos (4.100 bares, 880 restaurantes, 470 cafeterías y 220 hoteles y alojamientos).