Ibercaja ha acordado cerrar la mesa de negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) que inició en febrero. En principio, este ajuste iba a afectar a 550 trabajadores y suponer el cierre de 160 oficinas.

La entidad bancaria ha explicado en una nota de prensa que la situación de crisis sanitaria y el estado de alarma declarado en España el pasado 14 de marzo por la pandemia del coronavirus provocaron la suspensión de las reuniones de negociación del periodo de consultas del ERE.

"Dos meses después de esta suspensión y debido a la persistencia de la incertidumbre sobre el impacto organizativo y económico que la crisis sanitaria puede tener, el Consejo de Administración de Ibercaja ha decidido el cierre de la mesa de negociación, con desistimiento del proceso legal iniciado. La prudencia aconseja no seguir avanzando en este proceso en un contexto social como el actual", ha señalado.

No obstante, el banco mantiene abierta la posibilidad, en su caso y en el momento oportuno, de plantear un nuevo procedimiento de regulación de empleo cuando desaparezca la incertidumbre económica y organizativa generada por la pandemia.

UGT Y CCOO CONSIDERAN RAZONABLE LA DECISIÓN

UGT y Comisiones Obreras (CCOO) han considerado razonable que Ibercaja haya decidido no seguir adelante con proceso de expediente de regulación de empleo (ERE).

En declaraciones a Europa Press, la representante de la sección sindical de UGT en Ibercaja, Victoria Camarena, ha señalado que el cierre de este proceso no quiere decir que al año que viene no se vaya a abrir otro ya que el banco va a "reevaluar la situación".

"Es lógico es cierre del ERE, hay un hecho objetivo que ha modificado la situación de la empresa como es que se haya concedido un plazo de dos años para salir a Bolsa y, atendiendo solo a eso, es lógico que se cierre. Pero además es evidente que en las circunstancias actuales derivadas de la crisis sanitaria hay que hacer un replanteamiento", ha esgrimido.

En este punto, ha señalado que desde UGT han reclamado, desde el inicio de la crisis sanitaria, que se apliquen medidas de seguridad y salud. "Además pedimos una compensación a la plantilla porque hay muchísima gente que ha estado arriesgando su salud, al ser el banco un servicio esencial y no poder acceder al teletrabajo y las medidas han dejado bastante que desear".

Por su parte, CCOO también ha considerado que "lo más importante, es motivar a todas las personas que esperaban su salida y al resto de la plantilla, que lo están dando todo, poniendo en riesgo su salud física y mental, aguantando presiones de todo tipo, sufriendo agravios comparativos en rotaciones, medidas de prevención y teletrabajo".

"Ahora, más que nunca, CCOO Ibercaja exige una compensación para los trabajadores y que se tomen medidas para cumplir las prometidas eliminaciones de labores burocráticas absurdas e ineficientes y que se nos dote de todos los medios técnicos y de las medidas de seguridad necesarias, para realizar nuestro trabajo en las mejores condiciones posibles", ha apuntado el sindicato.