La factoría de PSA-Opel sigue sin fecha para retomar la actividad y ha pospuesto su decisión al memos hasta el próximo miércoles, día 6, cuando informará de nuevo a sus empleados de cualquier novedad al respecto. Los empleados estaban emplazados ayer a llamar a la línea 900 dispuesta por la empresa para comunicarles las novedades y la compañía les informó de que deben contactar de nuevo en cinco días.

Según informaron fuentes de la multinacional, sigue sin haber fecha para la vuelta al trabajo en la planta, aunque se espera que la actividad se pueda retomar «en breve», en función de la recuperación del flujo de suministros y de la reapertura de los concesionarios para poder retomar las ventas.

En todo caso, la factoría insiste a sus empleados en que mantengan la autoevalución de su estado de salud y que informen al servicio médico si presentan síntomas compatibles con el cononavirus.

En su momento, el 10 de abril, la dirección de PSA-Opel y la mayoría del comité de empresa ya firmaron un nuevo expediente de regulación de empleo temporal para la planta de Figueruelas, que se aplicará cuando concluya el vinculado a la fuerza mayor por el estado de alarma y hasta el 31 de julio.

La dirección y la mayoría de la representación de los trabajadores (UGT, CCOO, OSTA y CCP) se pusieron de acuerdo para firmar este expediente, por causas organizativas y productivas, que tendrá las mismas condiciones económicas que el que está actualmente en vigor y de cuya aplicación quedan excluidos los trabajadores con contratos parciales y los nacidos en 1959.

Protocolo de prevención

Por otra parte, la planta ya se está preparando para la vuelta al trabajo. La factoría ha diseñado un minucioso protocolo de prevención para garantizar la seguridad de sus trabajadores y evitar contagios. Así, por ejemplo, cada empleado dispondrá de cuatro mascarillas para cada día y de gafas protectoras, se han instalado cámaras termográficas para medir la temperatura de los trabajadores en las entradas, se han señalizado los espacios donde podría concentrarse un mayor número de personas como las máquinas de vending, se han colocado mamparas en las pilas lavamanos o se ha desinfectado gran parte de la planta.

En todo este proceso, la dirección de Figueruelas ha contado con información privilegiada, ya que el grupo PSA tiene una fábrica en Wuhan, la ciudad china en la que se originó la pandemia.