La residencia municipal de mayores de Valderrobres, en la comarca del Matarraña, había hecho un llamamiento «a la desesperada» porque no tenía personal para hacer el relevo del turno de las 19.00 horas, con la mitad de la plantilla contagiada, que ha tenido un gran éxito. «Lo hemos hecho de urgencia y a la desesperada porque la DGA no intervenir el centro y no tenemos personal para cuidar de los mayores», explica el alcalde, Carlos Boné, que ha agradecido que en cuestión de horas varias personas se habían ofrecido a trabajar el puente de Semana Santa. "Hasta el lunes estamos tranquilos, pero habrá que normaliza la situación", insiste Boné, que se ha mostrado muy agradecido con la implicación y solidaridad de la gente.

El director general de Salud Pública, Javier Falo, ha descartado por la mañana intervenir esta residencia o el centro Virgen del Pilar de Zaragoza, sin medios para poder hacer frente a la situación.

Según Falo, no es «adecuado» que una Administración local asuma las competencias sanitarias y, aunque admite que entiende la presión a la que están sometidos, asegura que lo mejor es cumplir el protocolo y priorizar que sean las propias residencias las que gestionen los centros. Ha explicado que "se intenta mantener a las personas en su propio entorno bien diferenciado: positivos, sospechosos, y no diagnosticados. Así se minimizan riesgos". La mejor fórmula, a su juicio, es "reorganizar" a los positivos.

Boné insiste en la necesidad de que el Salud les ayude. «Nos dice que trasladarán pacientes a otras residencias. Nos va a aliviar mucho la carga de trabajo pero tenemos que tener personal fijo», asegura.

En Valderrobres, tras los primeros de casos positivos hace un par de semana, 15 traslados de mayores con coronavirus a residencias de Alfamén y Zaragoza (la de Miralbueno), algún trabajador con síntomas y la negativa de la DGA a realizar la prueba a todos los residentes y empleados, el alcalde decidió adquirir tests rápidos. Esta mañana les han dado los resultados y de los 35 trabajadores, 19 han dado positivo, además de otros 26 mayores que se suman a los que ya había. «Tenemos 60 ancianos, la mayoría inválidos, y solo diez habitaciones individuales», explica el alcalde, que lamenta que ha día de hoy todavía están esperando los EPI. "Tenemos material gracias a la solidaridad de los vecinos y las donaciones de las empresas de la comarca", asegura.

El consistorio habilitó hace dos semanas, con los primeros casos de positivo, un hotel para aquellos trabajadores del centro que lo deseasen. Según explica Boné, los sanitarios y auxiliares que acudan a trabajar a Valderrobres durante esta crisis tendrán asegurado el alojamiento de forma gratuita.