El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, propondrá al Congreso de los Diputados alargar el estado de alarma hasta el 26 de abril, pero ha advertido de que será necesario volver a hacerlo de nuevo. El jefe del Ejecutivo ha tomado esa decisión después de reunirse esta mañana con el consejo de científicos y el comité técnico de gestión del coronavirus. "Vamos a tener sucesivos estados de alarma hasta recuperar la cotidianidad", ha declarado en una rueda de prensa en la Moncloa.

Sánchez ha admitido que no será suficiente que el estado de alarma dure hasta el 26 de abril, pero que lo hace así, pidiendo prórrogas quincelanes, porque considera necesario que el Congreso se pronuncie en estas circunstancias y quiere que crear ese "precedente". La Cámara baja debe votar cada vez que el Ejecutivo quiere alargar las medidas excepcionales, como hará, de nuevo, esta próxima semana.

Sánchez se ha puesto en contacto este mediodía con algunos líderes de los partidos políticos para explicarles las razones y pedirles su apoyo. Pablo Casado, presidente del PP y jefe de la oposición, apoyará el alargamiento, según ha anunciado él mismo en Twitter tras hablar por teléfono con jefe del Ejecutivo. "Le he vuelto a transmitir el apoyo del Partido Popular para las medidas de contención contra el coronavirus", ha manifestado Casado. "La lealtad y la unidad exigen eficacia y transparencia", ha añadido a mode de crítica. También respaldarán la prórroga Vox y Ciudadanos, como han ido apuntando sus dirigentes estos últimos días, de manera que la aprobación en la Cámara alta está asegurada. Esa sesión parlamentaria deberá celebrarse la semana próxima, ya que el estado de alarma está aprobado solo hasta el fin de semana próximo.

Contra el "relajamiento de las normas"

José García Molina, comisario principal de la Policía Nacional, ha denunciado que las fuerzas de seguridad empiezan a observar "cierto relajamiento en el cumplimiento de las normas". "Por favor, respeten las normas. El virus lo paramos todos juntos", ha dicho antes de advertir de que "se están aumentando las propuestas de sanción y las detenciones con puesta a disposición judicial".

España vive con importantes restricciones de movimientos desde el 15 de marzo para frenar el contagio de la covid-19, un coronavirus que ya ha causado más de 60.000 muertos en todo el mundo, 11.744 en España.