La dirección general de Salud Pública del Gobierno de Aragón decretó ayer la suspensión temporal de la actividad en una empresa hortofrutícola de Zaidín, en la comarca del Bajo Cinca, al detectarse un brote de coronavirus con ocho casos positivos entre sus trabajadores. Según varias fuentes consultadas por este diario, la compañía afectada por el brote y que ha debido cesar su actividad hasta que se controle la situación sanitaria es Frutas La Espesa SL, una firma con más de 30 años de experiencia en el sector y que emplea a entre 200 y 300 trabajadores, tanto en sus fincas como en el almacén de fruta.

Sanidad continúa elaborando el estudio de contactos de los casos positivos, que residen en las comarcas del Bajo Cinca, La Litera y Cinca Medio, y se han tomado las pertinentes medidas de aislamiento. La decisión de la clausura temporal se tomó al detectar «un incremento de los casos» y hoy mismo está previsto efectuar la prueba PCR a 150 trabajadores, aunque no se descarta realizar más en los próximos días, en función del estudio de contactos.

Desde Frutas La Espesa SL rehusaron hacer declaraciones al respecto a este diario. El alcalde de la localidad y presidente de la comarca del Bajo Cinca, Marco Ibarz, aseguró anoche que «no tenía confirmación oficial» de que el brote se hubiera producido en una empresa de la localidad que gobierna, «ni por parte de Sanidad, ni por parte de la empresa». Sin embargo, recordó que Zaidín cuenta en la actualidad con 1.500 temporeros y afirmó que «sabíamos que podía pasar algo así en cualquier empresa y por eso empezamos a crear espacios por si fuera necesario aislar a los positivos». En su localidad, pueden montar de manera inmediata 12 camas en el pabellón municipal, «aunque se podrían incorporar más porque tiene 800 metros cuadrados» y también en los vestuarios. De cualquier modo, insistió, «lo importante es controlar el brote y que no vaya a más».

El responsable de Frutas del sindicato UAGA en Fraga, Óscar Moret, que tampoco contaba con confirmación «oficial» de la empresa en la que se ha registrado el brote, reiteró que en la zona «se están cumpliendo las medidas de seguridad» y recordó que «el sector de la fruta es el que más tiempo lleva conviviendo con el virus», por lo que desde el inicio se ha estado alerta ante estos posibles rebrotes. Moret destacó que «el incremento de los casos en las fincas coincide también con el periodo de desescalada, en el que la gente se mueve más». Pero reclamó «que no se estigmatice a los temporeros, porque hay personas contagiadas en todas las empresas y nos preocupa que se identifique el virus con el temporero inmigrante». E insistió: «Tanto empresas como ayuntamientos han tomado medidas para poder actuar ante casos como estos».