Seis miembros de la Guardia Civil de Tráfico de Alfajarín han dado positivo en la prueba del coronavirus, mientras que otros cuatro compañeros están en cuarentena en sus viviendas y la cifra podría aumentar. Uno de los infectados fue ingresado en un centro hospitalario.

Una situación que complica la viabilidad de este puesto, ya que habría otros agentes que están de baja por otras circunstancias.

Las asociaciones profesionales como Jucil o AUGC vienen denunciando desde el inicio de la pandemia que los medios de protección individual no son suficientes. En algún caso como en Teruel recibieron mascarillas caducadas. No obstante, fuentes de la Delegación del Gobierno en Aragón señalan que "hay un certificado de la agrupación de tráfico que tras ponerse en contacto con el fabricante y por el buen estado de conservación son totalmente válidas para la protección".

Por otra parte, el sindicato Jupol anunció ayer que sus representantes en la Jefatura Superior de Policía de Aragón han renunciado sus liberaciones de servicio, asumiendo las labores propias de sus destinos y también sindocales. La organización ha explicado que adoptado esa medida de forma voluntaria al entender que la Policía Nacional necesita el "máximo personal para hacer frente a la pandemia del coronavirus". Este mismo sindicato, a través del abogado zaragozano, Marco Antonio Navarro, solicitó ante el TSJM que la Dirección General de la Policía les diera todo el material necesario de protección, una reclamación que fue aceptada por el tribunal.

En este mismo sentido, AEGC pidió, a través del letrado Jorge Piedrafita, medidas cautelarísimas o subsidiariamente cautelares ordinarias a los juzgados de lo social para que se obligue a la Dirección General de la Guardia Civil a proveer de equipos de protección individual y se realice test de detección a los guardias civiles que presenten síntomas o hayan estado en contacto con positivos o posibles positivos.