Los puntos limpios móviles de Zaragoza recuperaron su actividad la semana pasada, en cumplimiento del proceso de desescalada decretado por el Gobierno central, y lo han hecho incorporando al servicio un mayor catálogo de residuos domésticos que ahora pueden depositarse en ellos.

Se añaden, como novedad, baterías de automóvil, termómetros de mercurio, pinturas, colas, barnices o insecticidas en polvo, todos ellos con un máximo de una unidad por persona y día, ha informado el Ayuntamiento de Zaragoza en un comunicado.

También se podrán depositar cartuchos de tóner (uno al día), de tinta de impresión (cuatro al día), disolventes (uno al día con un máximo de 5 litros de capacidad) y agujas hipodérmicas (10 por persona y día y solo se admitirán encapuchadas).

Estos residuos se unen, por tanto, a envases, lámparas fluorescentes, pilas, aceite vegetal o mineral doméstico, aparatos eléctricos y electrónicos de pequeño tamaño o ropa usada, que una vez depositados en el punto limpio son posteriormente tratados por los gestores correspondientes.

Los camiones de recogida de estos puntos limpios móviles acuden regularmente a un total de 41 paradas diferentes, ubicadas en todos los distritos y barrios rurales.

Las paradas tienen unos días y horario de recogida fijos para facilitar el hábito del reciclado entre todos los ciudadanos y están señalizadas con un poste en el que se indican los días y las horas en las que el punto limpio está disponible en cada lugar concreto.

La consejera municipal de Servicios Públicos, Natalia Chueca, ha visitado este viernes uno de estos puntos limpios móviles, en el barrio rural de San Gregorio, donde ha recordado la importancia que tiene esta recogida, que llega a todos los distritos de la ciudad y ahora se amplía con otros residuos peligrosos.

Así, ha animado a todos los ciudadanos a hacer uso de ellos para, "entre todos", cuidar del medio ambiente y de la ciudad.