Martín González quiso dar una imagen templada en su primera comparecencia como zaragocista. Le tocaba ofrecer un tono de seguridad, al menos confianza. Ilusión, fe... todas esa cosas. Por dentro, cualquiera lo puede imaginar, le corren ríos de preocupación. No es para menos. Sabe que se enfrenta a una circunstancia desconocida en el mundo del fútbol, con la obligación de construir toda una plantilla profesional en solo un mes. Aún más, afronta el compromiso de darle a su entrenador un grupo mínimo con el que empezar a trabajar en solo unos días. Debe fichar ya, y hacerlo sin dar tiempo a la reflexión. Víctor Muñoz lleva dos semanas trabajando mañana y tarde, pero sin poder sacar conclusiones reales de lo que será la competición.

No se recuerda que nadie antes haya formado una plantilla en tan poco tiempo. Quizá en algún recóndito lugar del planeta. Quizá. Desde luego, no se ha hecho en una Liga profesional de un país tan relevante en el fútbol como es España. Tiene un riesgo evidente: las equivocaciones. Es obvio que en el Real Zaragoza tienen calculado que más de una contratación saldrá rana, pero se agarran a la experiencia y el buen hacer de Martín González, así como al buen número de favores que van a tener que pedir, como ya advirtió Petón en aquella primera rueda de prensa de la Fundación Zaragoza 2032. Más que nunca, hay que acertar al elegir los jugadores, algo que no se ha producido en las últimas temporadas, mucho más desde que Agapito Iglesias decidió manejar personalmente los fichajes.

El mercado estival se cerrará a finales de agosto y en el club se calcula que para entonces se habrán firmado entre 18 y 20 jugadores. Antes, no obstante, para la semana que empieza el 18 de agosto --el Zaragoza debutará el 23 o el 24--, habrá tenido que llegar la base del equipo, los jugadores que deben servir a Víctor para presentarse con garantías en el encuentro inaugural de la competición, ante el Recreativo de Huelva en el Colombino.

Si es por nombres, las serpientes de verano van sobrealimentadas en los últimos días con la actualidad zaragocista. Solo cinco días después de presentarse el nuevo consejo de administración, se ha relacionado al club aragonés con veinte futbolistas. De todo hay, como se puede comprobar. Porteros: Casto (Murcia) y Julio César (libre). Defensas: Cabrera (Castilla), Bellerín (Arsenal), Diogo (libre), Pulido (Castilla) y Cadamuro (Real Sociedad). Centrocampistas y volantes: Soriano (Almería), McEachran (Chelsea), Longás (Sabadell), Llorente (Castilla), Álvaro (Valladolid) Caffa (Asteras) y Pereira (Villarreal). Delanteros: Borja Bastón (Atlético), Guillermo (Athletic), Sandro (Barça B), Cedrid (Mallorca), Ifrán (Real Sociedad) y Raúl de Tomás (Castilla).

De estos, luego serán los que sean. Muchos en todo caso. A todos los futbolistas que superan los 200.000 euros en la ficha se les va a dar salida. Es decir: Paglialunga, Barkero, Abraham, Fernández y Víctor Rodríguez. Incluso Lucas Porcar puede salir. Quedarían en la primera plantilla Alcolea, Rico, Adán y Ortí. Ese es el panorama hoy en día.