El Liverpool sigue sin tocar fondo. El vigente campeón de la Premier sigue perdiendo puestos en la clasificación semana a semana. Los de Jürgen Klopp, no hace tanto líderes, ya son sextos a 16 puntos del Manchester City (y con un partido más) después de perder este sábado en Anfield contra el Everton (0-2).

El equipo azul llevaba 22 años sin ganar el derby de Mersey en el campo de su vecino. Pero Anfield, tradicionalmente un fortín para los 'reds', es otra cosa sin público. El Liverpool ha perdido sus últimos cuatro partidos de Liga en casa, algo inédito desde 1923, y no siempre contra grandes rivales: Burnley (0-1), Brighton (0-1), Manchester City (1-4) y ahora Everton han asaltado Anfield en este 2021, y antes de estas cuatro derrotas consecutivas no pudo pasar del empate ante Manchester United (0-0) y Albion (1-1). Por si fuera poco, la semana pasada cayó en el campo de un rival directo, el Leicester (3-1).

A los 3 minutos Richarlison (asistido por James Rodríguez) ya había adelantado a los 'toffees' de Carlo Ancelotti, que sentenciaron de penalti en el tramo final Sigurdsson (m. 83). Un momento de gloria para el Everton, que no se imponía a su gran rival, ni en casa ni fuera, desde el 2010. Aquel año se impuso en Goodison Park y desde entonces había enlazado 20 derbis sin ganar.

El Liverpool, con un pie en cuartos de la Champions tras el 0-2 al Leipzig, está ahora mismo fuera incluso de las plazas de Europa League, y empatado a 40 puntos con el propio Everton, que es séptimo. Con la reválida del título imposible, el objetivo 'red' es ya acabar entre los cuatro mejores y clasificarse para la Liga de Campeones. En ese sentido, el Chelsea está a solo tres puntos tras pinchar ante el Southampton (1-1).