Las acciones del Real Zaragoza SAD propiedad de Agapito Iglesias quedarán, según coinciden en apuntar varias fuentes jurídicas, al margen del embargo judicial que tramita el Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza en el caso pagarés por su valor negativo.

El juez que investiga el sobrecoste de las obras de construcción de las naves de Autocity --Plaza las liquidó por 32 millones después de habérselas adjudicado a la empresa de Iglesias por 14 unos meses antes de modificar el proyecto-- impuso la semana pasada una fianza de responsabilidad civil de 18,85 millones de euros a los tres primeros imputados en la causa: Iglesias, encartado como presunto cooperador necesario de un delito de malversación y otro de administración desleal y como supuesto autor de una estafa, el exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril, y el exconsejero delegado de la empresa pública, Carlos Escó, a los que atribuye indiciariamente la autoría de las dos primeras infracciones

La ejecución de una fianza de responsabilidad civil --los recursos no suspenden los trámites, salvo que la Audiencia la revoque-- conlleva la averiguación de bienes de los imputados a través de los registros mercantiles y de la propiedad y del rastreo de sus cuentas bancarias y sus activos de otro tipo, como las participaciones en empresas, acciones y similares.

Estas últimas son sometidas a tasación para establecer su valor. Y si este resulta negativo, son desestimadas.

El Real Zaragoza SAD tiene un capital social de tres millones de euros y acumula deudas por casi 150 --113 pendientes de pago del concurso, más de 20 del 2013 y varios más del último ejercicio--, con lo que su valor real es de más de 40 euros negativos por cada euro nominal.

Otra cosa es que pueda quedar embargada la propiedad de Zaragoza Sport Arena XXI, la sociedad instrumental a través de la cual Iglesias controla la SAD.