El Real Madrid ha vuelto a verse salpicado con problemas con Hacienda por quien fue su entrenador entre el 2010 y el 2013. La sección de Delitos Económicos de la Fiscalía de Madrid ha denunciado ante los juzgados de Pozuelo de Alarcón al actual técnico del United, José Mourinho, por dos delitos fiscales en los ejercicios del 2011 y 2012.

La cifra defraudada asciende, según la denuncia fiscal, a 3.304.670 euros: 1.611.537 euros en el ejercicio del 2011 y 1.693.133, en el 2012. La Fiscalía sostiene que utilizó una estructura societaria ubicada en las Islas Vírgenes Británicas e Irlanda.

Se basa en la información que le remitió la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) en la que consta que en fecha indeterminada, «pero antes del 17 de septiembre de 2004», el denunciado suscribió un contrato por el que cedía sus derechos de imagen a la sociedad Koper Services con sede en las Islas Vírgenes Británicas.

Ese día firmó un nuevo contrato de cesión de sus derechos de imagen entre Koper Services y la irlandesa Multisports & Image Management Limited, sociedad que en diciembre del 2008 suscribió con Polaris Sports Limited un contrato de representación para que buscara y negociara contratos comerciales.

Tras dejar el Chelsea, José Mourinho firmó con el club blanco y trasladó su residencia a Madrid, motivo por el cual adquirió la condición de residente fiscal en España. Sin embargo, «con ánimo de obtener un beneficio ilícito», presentó en plazo sus declaraciones de IRPF de los ejercicios 2011 y 2012 sin declarar sus ingresos procedentes de la cesión de sus derechos de imagen.

ACTA DE CONFORMIDAD

El 23 de julio del 2014 la AEAT comunicó a Mourinho que le iba a investigar sus declaraciones de IRPF de los ejercicios 2010-2012 y de no residentes de 2013. Aportó los certificados emitidos por Global Directors Limited de los que se desprendía que Operating Nominees Limited ostentaba el 100% de Kooper. La Agencia Tributaria hizo la correspondiente liquidación y el técnico firmó un acta de conformidad y una sanción de 1.146.307,83 euros.

No obstante, tras ello, la AEAT supo que Kooper «fue creada por el denunciante con el objeto de ocultar sus derechos de imagen» y que él es su titular a través de Kaitaia Trust, con sede en Nueva Zelanda. Ello supone que la documentación que aportó de la sociedad «no se corresponda con la realidad», concluye la Fiscalía.