Al Huesca se le van acabando las jornadas y la distancia con la zona de la permanencia continúa siendo considerable: seis puntos a falta de siete jornadas. Sin embargo lo que no se le termina al equipo oscense es la ambición. El deseo y las ganas de pelear por la salvación. Mientras haya vida habrá esperanza para este grupo de jugadores que ha hecho de la honradez profesional su bandera. «Sabemos que tenemos que empezar a ganar porque lo necesitamos. Viene a El Alcoraz el Barça, que va a ser el rival más complicado, pero plantearemos el partido de la mejor manera para que no estén cómodos».

Palabra de goleador y del hombre en cuyas piernas y en cuya cabeza se han depositado las esperanzas de permanencia. Desde que llegó en el mercado de invierno suma ya cuatro goles, decisivos para que el Huesca siga con vida a estas alturas de la competición. ¿Cómo ganar al líder de Primera y más que probable campeón de nuevo? El catalán lo tiene claro: «Dejándonos la vida en el campo. Trabajaremos con el cuerpo técnico para ponerles las cosas difíciles y aprovechar las oportunidades que tengamos».

El Barça acudirá al estadio de El Alcoraz, que registrará un lleno absoluto, en el mejor momento posible: con la Liga prácticamente sentenciada y en medio de la eliminatoria de cuartos de final de la Champions contra el Manchester United. «Quizás sea el mejor momento para enfrentarnos a ellos», reconoció Gallego en alusión a las posibles rotaciones que pueda poner Valverde en práctica. «Eso sí, el equipo que salga será igualmente muy competitivo, pero nosotros estaremos ahí para ganar. Últimamente competimos muy bien y hay que tener la suerte un poco de cara».

LA POLÉMICA

Al delantero del Huesca también se le preguntó por el polémico penalti de Mantovani contra el Levante el pasado domingo. ¿Fuera o dentro del área? «El árbitro dijo que lo había visto así, yo lo he visto repetido y lo veo fuera. Son detalles jodidos, más cuando estás abajo».

Enric también revivió aquella ocasión que marró contra el Celta de Vigo en casa con el tiempo casi cumplido y la portería vacía a su disposición. Hubiera sido el 4-3 y el Huesca tendría ahora dos puntos más. «Son cosas que pasan en el fútbol. La noche de después no fue de las mejores para mí, pero había que levantarse para ir al fin de semana con las mejores sensaciones y así fue», comentó. Luego le marcó de cabeza al Levante. Además, reconoció el buen momento goleador de los oscenses, aunque cree que debe ir acompañado de «estar mejor en defensa y no encajar tanto». Por último, no duda en seguir creyendo en la salvación. «Y tanto. Se ve cómo está respondiendo el equipo en cada partido», acabó.