Fernando Alonso, noveno clasificado en el Gran Premio de Bahréin, afirmó tras la tercera carrera del Mundial de F-1 que "la revancha llega en China", al referirse a la próxima cita del certamen, en la que espera que su F14 T haya mejorado lo suficiente para acercarse a los Mercedes. "Sabíamos que ésta iba a ser una carrera complicada y difícil. Sumar solo uno o dos puntos no era lo que queríamos. Ahora tenemos unos días de pruebas en este mismo circuito para tratar de mejorar", dijo Alonso nada más bajarse del monoplaza. El piloto asturiano señaló que tras los problemas de falta de potencia que tuvo el sábado, "salvo al principio, estuvo al cien por cien".

"Ayer (por el sábado) no sabíamos cuál era la razón (de la falta de potencia). Era por un problema de ajustes al cambiar dos botones del volante. Al comenzar la carrera el coche tenía poca potencia, pero luego ha estado al cien por cien", explicó el bicampeón español. "No lo hemos hecho lo suficientemente bien como para sumar más puntos. Los Mercedes se están escapando. Hamilton y Rosberg están siendo impecables y además tienen la ventaja de unas mejores prestaciones. En las próximas carreras hay que tratar de ponerles las cosas difíciles", precisó. "Ha sido un fin de semana no del todo bueno. Sabíamos que este circuito era complicado para nosotros".