Estaba satisfecho. Fernando Alonso se marchó con "un buen sabor de boca" tras terminar cuarto en Montmeló, aunque "pensativo" sobre lo que le había faltado para subir al podio. El piloto español reveló que, a falta de tres vueltas, le dijeron desde el box de Renault que no debía arriesgar para asegurar su cuarta posición y la tercera de su compañero, el italiano Jarno Trulli. "Sí, pero la clave de la carrera no fueron las tres primeras vueltas", dijo Alonso, que lo argumentó. "En el inicio de la carrera perdí esos 20 segundos con Jarno que luego me costaron 30 vueltas hasta recuperarlos al final y ya fue demasiado tarde", añadió. En todo caso, aseguró estar "contento" con el resultado. "Hemos llegado a Barcelona siendo el cuarto equipo por detrás de Ferrari, Williams y BAR y nos vamos justo por detrás de Ferrari", destacó.

Respecto a la estrategia de la scuderia de realizar dos paradas, Alonso ironizó al comentar que Ferrari "tiene tanta superioridad que casi pueden hacer una o ninguna parada porque van a ganar casi igual". Por último, el piloto español se refirió a su igualdad con Trulli en la clasificación del Mundial, donde ambos cuentan ahora con 21 puntos en la cuarta y quinta posición, respectivamente. "Llevamos todo el campeonato empatados, pero no pasa nada, estamos en la quinta carrera y aún faltan muchísimas. Todo puede cambiar, pero con este resultado vamos a encarar con la moral a tope las próximas carreras", dijo.

FRIALDAD DEL ALEMAN Por su parte, Michael Schumacher confirma día a día que es el mejor piloto de todos los tiempos. Pero el alemán no es de los que se recrea con las cifras que avalan su impresionante palmarés. Quién sabe si ése es el secreto de su éxito. "Cinco triunfos seguidos, 200 grandes premios, 75 victorias... Estoy muy orgulloso, pero ahora sólo pienso en la próxima carrera", zanjó el insaciable hexacampeón del mundo, al que muchos ven capaz de ganar todas las carreras.

Es tal la ambición del alemán, que éste ya piensa en ser el mejor en la próxima cita, en Montecarlo. "Es un circuito muy prestigioso, por lo que me gustaría ganar, pero no por el récord de las seis victorias", afirmó. Sólo sufrió cuando rompió uno de los escapes. "Mentalmente, fue muy duro aguantar hasta entrar en boxes", admitió. Su compañero de equipo, Rubens Barrichello hizo dos pit stops . Eso le permitió remontar hasta ser segundo.

PREVISIONES SUPERADAS En Renault se vivió una alegría parecida a la que disfrutaba Ferrari. Patrick Faure, presidente de la división deportiva de la marca francesa, estaba exultante. "Trulli y Alonso han protagonizado la mejor salida que he visto en mi vida, especialmente la de Jarno", comentó. Faure admitió que las previsiones que se habían marcado a principios de temporada están siendo rebasadas "con creces". "Intentamos ser los segundos tras Ferrari en el Mundial de constructores para intentar el asalto al título el año que viene", anunció.

Si Renault va bien, McLaren va fatal y está siendo la decepción del Mundial. Cuando le preguntaron a Flavio Briatore, jefe de la escudería francesa, sobre lo extraño que era ver como Trulli y Alonso doblaban a Coulthard y Raikkonen, el playboy italiano respondió: "No es una imagen extraña, sino maravillosa. Me encanta", respondió con una sonrisa. La que no tenía Coulthard, que se agarró al tópico para explicar la pésima temporada de su equipo. "Hay que seguir trabajando para mejorar. Nos llevará tiempo", comentó el escocés.