Michael Schumacher ya manda de nuevo en la Fórmula-1. Tras un inicio de campeonato en el que se vio sorprendido por los Raikkonen, Alonso y compañía, el pentacampeón del mundo tomó la cabeza del Mundial por primera vez este año después de imponerse ayer en el Gran Premio de Canadá, octava prueba del campeonato. Una cita en la que el piloto español de Renault Fernando Alonso acabó cuarto tras una carrera extraordinaria.

Con la primera línea de la parrilla copada por los dos Williams-BMW de Ralf Schumacher y Juan Pablo Montoya, la tarea del asturiano en la primera curva no iba a ser sencilla, como tampoco lo fue para Michael Schumacher. Ambos salieron por detrás de los Williams y fue el alemán quien tomó la mejor trazada. Alonso se puso detrás y Rubens Barrichello (que salía desde la tercera fila) llegó a tocarle, aunque el español mantuvo el tipo y aguantó el envite. Lanzados en una primera vuelta rapidísima, los dos Williams se colocaron con un ritmo muy fuerte que sólo Schumacher pudo seguir.

GOLPE DE SUERTE El primer golpe de suerte para el piloto de Ferrari llegó en la tercera vuelta con un trompo inesperado de Montoya, lo que le permitió colocarse tras su hermano Ralf y a Fernando Alonso auparse hasta el tercer puesto, posición que sólo mantendría cinco vueltas hasta que se vio superado por un Montoya que llegó lanzado tras el error inicial.

Como ya viene siendo habitual esta temporada la victoria del GP se decidió en los boxes ante la práctica ausencia de adelantamientos en toda la carrera. Michael Schumacher aprovechó la parada de su hermano en la vuelta 20 para colocarse por delante, parar en la vuelta siguiente y volver a la pista por delante de Ralf. Ese buen trabajo en el repostaje, que de paso permitió a Fernando Alonso gozar del liderato durante cuatro vueltas hasta su primera parada, fue el que a la postre le daría el triunfo al piloto de Ferrari.

La victoria del piloto alemán no iba a ser la única noticia en Montreal. Los incidentes de Trulli y Raikkonen (ambos con Michelin) al perder la cubierta del neumático y los retrovisores colgando de los Williams de Schumacher y Montoya, fueron otros aspectos que amenizaron una carrera en la que, mientras eso ocurría, Fernando Alonso trataba de enderezar tras una táctica poco agresiva de su equipo.

REMONTADA En la segunda tanda de repostajes Michael Schumacher volvió a ganarle la partida a todos y se mantuvo en cabeza, mientras por detrás Ralf Schumacher no se despegó de su hermano desde ese momento y hasta el final de la misma. Montoya se lanzó como un poseso a por los dos pilotos de cabeza, llegando a contactar con los mismos en el momento en el que Alonso, tras su segundo respostaje, hizo una recuperación espectacular reduciendo la diferencia con el líder de 9.7 segundos en la vuelta 56 a sólo 1.6 segundos a cuatro vueltas del final.

El ritmo de Alonso fue infernal y la presencia de Montoya, que rodaba con tiempos más lentos que los del piloto asturiano, taponó sus ilusiones de cara a conseguir su cuarto podio de la temporada (tras los de Malasia, Brasil y Cataluña). Michael Schumacher superó en la clasificación a Raikkonen, que ayer fue sexto, y Alonso se mantuvo tercero aunque a hora sólo tiene a un punto a Ralf Schumacher.