Fernando Alonso (Renault) se declaró esperanzado en sus posibilidades de conseguir podio el domingo en el Gran Premio de Hungría, a pesar de su discreta actuación en los entrenamientos libres de ayer. Los resultados no son muy preocupantes, habida cuenta del lamentable estado de la pista y de la función de estas rondas, que es básicamente probar los neumáticos. El asturiano se mostró satisfecho con las pruebas y confió en haber "elegido bien" las gomas, aunque hoy tendrá una última oportunidad de equiparse.

El español de Renault no pudo pasar de la undécima posición en la primera ronda de entrenamientos, que dominó Schumacher (Ferrari), superando la marca que el año pasado dio la pole al asturiano. La segunda sesión, en la que venció Raikkonen (Mc Laren--Mercedes) aventajando en 125 milésimas a Schumacher, dio la oportunidad a Alonso de superarse y quedar décimo. El finlandés dejó patente la gran progresión de Mercedes en las últimas pruebas del campeonato.

No fue un día propicio para ninguno de los dos hombres de Renault: Jarno Trulli, primer piloto de la escudería, obtuvo un noveno y un decimoctavo puesto en las sesiones. Mientras, Alonso parece asumir la dificultad de revalidar su primer y único triunfo en la Fórmula 1, que consiguió la pasada temporada en este circuito de Hungaroring, pero no renuncia a subirse al cajón: "Conseguir un podio el domingo sería un objetivo más realista que la victoria"--admitió el piloto--. "Creo que va a estar muy complicado, Ferrari este año es más fuerte que el año pasado y los McLaren también están en un nivel muy alto, quizás por delante de nosotros". Hoy los pilotos dispondrán de otras dos rondas de entrenamientos libres por la mañana, antes de las dos sesiones de clasificación que tendrán lugar por la tarde, y que decidirán como queda configurada la parrilla de salida del Gran Premio, la decimocuarta prueba del Mundial.