--¿Se esperaba su despido?

--Sinceramente, no.

--¿Les han dado alguna razón?

--La que el director general nos haya querido dar, simplemente. Ayer por el miércoles a las dos del mediodía se reunió personalmente con cada uno de nosotros tres y nos comunicó que no íbamos a seguir, simplemente eso.

--¿Ciertos exjugadores incomodan en el club?

--Al propietario del club probablemente sí.

--¿Por algún motivo particular?

--No, porque en los últimos 24 meses creo que le he visto diez minutos, así que no creo que yo le haya incomodado mucho.

--¿El hecho de que haya movimientos externos asociados a exjugadores ha podido influir?

--Yo puedo hablar de mi caso personal y particular y yo no he tenido ni buena ni mala relación con él, simplemente no la he tenido. Yo he sido un empleado más del Real Zaragoza que he intentado hacerlo lo mejor posible, que unas veces me habré equivocado y otras habré acertado, pero nada más.

--Están saliendo del club todos los exjugadores.

--Eso es una decisión del propietario y ahí no podemos entrar. Y estoy diciendo del propietario del club, no del que nos lo comunica.

--Es decir, que Agapito Iglesias es el que está detrás de todo.

--El que está detrás no, el que está delante.

--¿Y ese paso atrás que siempre dice que ha dado?

--Nunca lo ha dado.

--¿Tan mal funciona la Ciudad Deportiva que hay que hacer tantos cambios en pocos años?

--Quizás el problema sea no haber mantenido a la persona que en su día estaba cuando llegué yo a la Ciudad Deportiva. Quizá haya habido excesivos cambios.

--García Pitarch dijo que su trabajo no había sido malo.

--Creo que en los últimos 12 meses se han hecho cosas buenas en la captación de jugadores. Hay cuatro en el primer equipo ahora mismo, dos que jugaron en Primera desde la jornada uno Víctor Rodríguez y José Mari y otros dos como Tarsi y Carlos Hernández que estuvieron con el B. Estoy hablando de lo que hemos hecho en los últimos doce meses, incluso la temporada anterior, que es cuando más me han dejado trabajar. Estos diez últimos meses no hemos podido firmar a futbolistas porque económicamente el club no se lo ha podido permitir. El trabajo de la 12-13 está reflejado más en el ordenador que en fichajes. Lo he dejado en la base de datos de la Ciudad Deportiva.

--¿Ha trabajado con libertad?

--Más o menos. Me hubiera gustado que me hubieran hecho más caso, pero la estructura del club es la que es. Me hubiera gustado que hubiéramos sido un poco más ágiles a la hora de concretar incorporaciones.

--¿Cuál era su relación con los técnicos del primer equipo?

--Ninguna. Con el primer equipo, ninguna.

--¿Y con la comisión deportiva?

--Ninguna. No he tenido nunca ninguna relación con la comisión deportiva. Nunca jamás se me ha preguntado por nada del primer equipo, salvo algún futbolista que he podido ver de algún filial, pero nada más.

--Su trabajo era la captación de jugadores para el B y el juvenil.

--Efectivamente. En estos últimos meses no se ha incorporado ninguno para el juvenil por problemas económicos y tan solo un jugador de fuera va a venir para el filial, todo lo demás son jugadores que tenemos en contrato más juveniles.

--Es decir, que ha dejado hecho el trabajo de la próxima campaña.

--El Real Zaragoza B está completamente hecho.

--Y sin embargo prescinden de sus servicios.

--Vuelvo a decir que no es decisión mía, es del propietario y a él deberíais preguntárselo. Desgraciadamente creo que es difícil que se lo preguntéis.

--¿Agapito también está al frente de la Ciudad Deportiva?

--Lo desconozco. No sé exactamente qué es lo que hace. Sé que está al frente del club, pero no veo los movimientos que hace. Insisto en que yo en los últimos 24 meses habré hablado con él unos diez minutos, el año pasado cuando tuve la reunión con Manolo Jiménez tras salvar al primer equipo.

--¿Antes, cómo era su relación?

--Al principio, buena. No era una relación personal sino profesional, pero entonces él tenía una relación más personal con los empleados.

--¿Cree que llegan suficientes jugadores de la cantera al primer equipo?

--Es una pregunta complicada. Todos los que estamos en la Ciudad Deportiva queremos, que nadie tenga la menor duda, que haya más jugadores de Aragón. Pero para eso igual deberíamos de prepararlos de mejor manera. Y yo que he sido entrenador de las categorías inferiores también tengo parte de culpa, de que ciertos jugadores a los que yo he entrenado no hayan llegado.

--¿Ha cambiado mucho el Real Zaragoza desde 1996?

--Bastante, pero no solo el Real Zaragoza, ha cambiado todo el mundo. Cuando salí del Athletic era un club similar, un club más o menos familiar. Calculo que no habría más de 15 personas trabajando, no habría más de cuatro o seis personas en la dirección alta del club. Y ahora es todo desbordante, la vorágine de un club de Primera División no tiene nada que ver.

--¿Con qué se queda?

--De lo bueno, bueno, con la etapa de futbolista. Yo es que me considero futbolista. Luego tienes que llevar una vida porque la carrera profesional se acaba y algo tienes que hacer, intentar reubicarte, pero yo con lo que más me identifico es con los seis años que pasé como futbolista. Y quiero aprovechar para agradecer a todos los aficionados del Real Zaragoza el respeto y el cariño con el que me han tratado siempre, así como a los medios de comunicación. Me marcho enormemente agradecido.