El Sevilla cortó una racha de tres derrotas consecutivas y con su victoria vuelve a entrar en la lucha por conseguir un puesto en la Copa de la UEFA, mientras que el Espanyol queda muy tocado en su intención de permanecer en la categoría. El equipo local, pese al triunfo, no estuvo nada de acertado y sólo las carencias del rival le valieron para llevarse de una manera sufrida los tres puntos.

En la primera parte, salvo en aisladas acciones, el Espanyol no tuvo problemas para controlar el juego y crear cierto desasosiego en las gradas ante la dubitativa defensa local. Tras el descanso, Caparrós, técnico sevillista, visto los pocos frutos de la primera, sacó de inicio a Darío Silva, pero sería Antoñito el que marcara el solitario tanto del triunfo.