No escondió Jagoba Arrasate el carácter especial y vital que tiene el duelo de esta noche ante el Zaragoza. «El contexto es de partido grande y a ver si estamos a nuestro nivel para conseguir una victoria que sería muy importante. Es un choque especial, siempre lo es jugando en El Sadar, pero ante este rival más todavía», dijo el técnico, que añadió: «El Zaragoza llega en un gran momento, sobre todo fuera de casa, desde que ha cambiado de entrenador ha sido capaz de ganar en Gijón o en Lugo».

Insistió Arrasate en que el equipo zaragocista «juega muy bien al fútbol» y, por tanto, al conjunto rojillo va a exigirle «estar muy bien en la presión», por lo que espera además un choque «abierto, de alternativas, y bonito para el espectador». Arrasate, cuestionado por el hecho de que, si Osasuna gana, sumaría nueve victorias consecutivas en casa e igualaría el récord registrado en la 06-07 de la mano de Javier Aguirre, admitió que «son números importantes. Además, tenemos la posibilidad de superar la barrera de los 50 puntos estando en febrero, eso son palabras mayores», recalcó, para incidir en que esa oportunidad es «relevante» y desear que los suyos sigan en la línea de juego mostrada en El Sadar.

SIN RUBÉN GARCÍA

El técnico no podrá contar con el defensa Lillo, tras su pericarditis, el centrocampista Perea, lesionado, ni con el mediapunta Rubén García, que no ha logrado recuperarse. No recupera así a uno de sus hombres más importantes y estará obligado a rearmar el ataque, como ya hizo ante el Numancia, en el que optó por Juan Villar como su sustituto, Roberto Torres y Rober Ibáñez en las bandas y Brandon en punta. Un esquema que podría repetirse, si bien lo más factible es que entre Barja en detrimento de Rober Ibáñez. David García, que contra el Numancia jugó con una máscara, seguirá en el once y Arrasate ha citado a 18, con el centrocampista del filial Jon Moncayola.