Lo que comenzó con unos dias de mal tiempo y ligeras nevadas, ha dado paso a un temporal en toda regla. Nieva dia y noche y ya hemos acumulado en el campo base más de un metro de nieve. No tiene ninguna pinta de parar. Las previsiones siguen marcando una enorme baja presión sobre la zona por unos cuantos días más.

Cada mañana hay que desenterrar las tiendas y hacer un camino hasta el comedor. Una vez hecho, nos desplazamos hasta este lugar y pasamos el día completo, charlando, jugando a las cartas y comiendo. Afortunadamente, trajimos comida en abundancia, comida de la tierra y cada vez que abrimos una lata de sardinas, cortamos un trozo de queso o saboreamos un pedazo de jamón turolense, nos sentimos más cerca de nuestros hogares.

Leones enjaulados

Cada mañana, tras el desayuno, te enfrentas a un folio en blanco, para rellenar como mejor puedas: Leer, escribir, meditar, charlar, son actividades interesantes, pero a todas luces insuficientes para llenar el vacío. Somos gentes de acción y eso hace que, día a día, la moral vaya menguando. Si llega el buen tiempo, seremos como leones enjaulados que recobran su libertad. No obstante, el buen juicio debe hacernos reflexionar y tenemos que pensar que las condiciones arriba serán muy muy peligrosas. Calibrar todas estas variables será nuestra principal tarea y resolver las ecuaciones planteadas ante esta nueva situación, será nuestro mejor logro.

La montaña se va haciendo un poco más fuerte cada día que pasa, al igual que nosotros nos vamos debilitando. Por eso deseamos que acabe este periodo, de dudas y debilitamiento, para poder seguir contando con energía y posibilidades de ascender. De momento, creo que van ganando ellas la partida. En este primer asalto vamos perdiendo por puntos e incluso nuestro pequeño logro llamado campo 1, en estos instantes, reposará enterrado para siempre bajo un manto blanco. No debemos olvidar que así es este deporte: Saber aguantar agazapado, tragando miseria para luego dar un salto y luchar sin tregua. Solo espero que termine este asalto, para poder tomar agua en mi rincón.