Zaragoza ha comenzado la carrera oficial por albergar la semifinal de la Copa Davis entre España y Francia, cuyo inicio fue el envío, ayer, a las once ciudades candidatas, por parte de la Federación Española de Tenis, del pliego de requisitos que han de cumplir para convertirse en sede. Al equipo español le gusta la capital aragonesa, aunque sus preferencias serían Barcelona y Alicante, por encontrarse a nivel del mar y, en el caso de ésta última, por tratarse de la tierra natal de Juan Carlos Ferrero.

"Nos gusta Zaragoza y el recuerdo de la eliminatoria frente a Marruecos en el 2002 es muy bueno. La ciudad y las características de la pista se adaptan a lo que les gusta a los tenistas", explicaba ayer Juan Bautista Avendaño, portavoz del G-3, grupo de capitanes del equipo español. La grata experiencia de febrero del 2002 es una de las ventajas, aunque también puede jugar en su contra el hecho de que la Federación busque el máximo reparto posible de sedes por toda España. Entre Barcelona, Alicante, Santander, Málaga, Almería, Granada, Marbella, Tenerife, Oviedo, Gijón y Zaragoza han de salir las cuatro finalistas en una primera criba. El 28 de mayo se conocerá la sede.