Un gol de Larrivey en la segunda mitad, la gran actuación del meta Sergio y los palos --hasta un total de cuatro hicieron los azulgranas-- dejaron al Barcelona sin liderato y dieron la primera victoria del Celta (0-1) en el Camp Nou en la historia de la Liga. En apenas una semana, el equipo de Luis Enrique ha dilapidado la ventaja de cuatro puntos que tenía sobre el Real Madrid --ahora líder provisional-- al caer en el Bernabéu y hacerlo también ayer, ante su afición, en un encuentro en la que el infortunio y la falta de control sobre el juego le hicieron mella a partes iguales.

Sin Xavi ni Iniesta en el campo, los hombres de Luis Enrique se olvidaron de la pausa y renunciaron a domar el partido para enredarse en un eterno correcalles en el que Neymar, Messi y Suárez campaban a sus anchas. Tiene oro puro el Barça arriba, pero le falta todo lo demás. Entre la tripleta ofensiva tuvieron, solo en la primera parte, media docena de ocasiones claras.

Al Celta parecía no importarle la facilidad con la que llegaba el Barça, porque eso le permitía acercarse con celeridad y casi sin esfuerzo a las inmediaciones de Bravo. La segunda mitad empezó con otro balón al palo de Neymar, que remató a bocajarro un centro desde la izquierda de Jordi Alba. Para colmo de males culés, el Celta hizo el 0-1 a los diez minutos de la reanudación.

Un mal despeje de Alves, que no le ganó ni un solo duelo a Nolito, acabó en las botas del exdelantero azulgrana, que habilitó de tacón a Larrivey para que éste batiera, de primeras, a Bravo. El golazo celtista dejó tocado al Barça, que estuvo bastantes minutos sin oler la portería rival. Suárez tuvo el empate en la recta final, pero se encontró con otro paradón de Sergio, y Messi estrelló otro tiro en la cruceta.