¿La Liga pasa por el Bernabéu? Esa pregunta le hicieron a Luis Enrique ante la proximidad del gran clásico (23 de abril) y la relevancia que tendrá el duelo entre los dos aspirantes al título, separados tan solo por dos puntos (y un partido menos del Madrid). «La Liga pasa por Málaga», replicó el entrenador, entendiendo que sin los tres puntos de La Rosaleda (20.45) menos presión se podrá ejercer. El técnico azulgrana da por supuesto que el Madrid vencerá al Atlético en el derbi (16.15). No sabe si verá el partido: lo dejó a expensas de si tiene sueño para hacer la siesta.

Siempre hay que prepararse para las peores situaciones. También sospecha que revalidar el título exigirá al Barça la versión perfecta: ganar los 8 partidos que quedan de Liga, los 24 puntos. «Pero también dudo de que algún equipo lo consiga. Ojalá seamos quienes rompamos este vaticinio», aventuró Luis Enrique. El Barça no ha pasado de las seis victorias seguidas.

Aun asumiendo las dificultades, el entrenador del Barça es optimista. Las últimas prestaciones del equipo, que ha goleado al Granada y al Sevilla en cinco días, alientan ese espíritu. La alineación de Málaga variará respecto a la última (faltarán Piqué y Rakitic, sancionados) y también respecto a la del martes ante la Juventus. Es la primera de las ocho finales. Toca rotaciones, salvo para el tridente.