El centrocampista vasco, que fue baja en Girona por una elongación en el muslo, se ejercitó ayer con normalidad con el resto del grupo dejando claro que está a disposición de Víctor Muñoz para el partido ante Las Palmas. Barkero trabajó con un vendaje en la zona por precaución, pero podrá jugar y en principio apunta a volver al once para jugar junto a Arzo en el doble pivote de la medular. Mientras, Leo Franco hizo trabajo individualizado en el gimnasio, aunque su presencia no peligra. El portero argentino recibió un golpe en un pie en el duelo en Montilivi, pero pudo acabar sin problemas el encuentro. Mientras, el segundo meta del equipo, Pablo Alcolea, se ejercitó ya sobre el césped y está en el tramo final de la recuperación de su lesión en el oblicuo, aunque no llegará a tiempo al duelo del domingo ante el conjunto canario y su puesto en el banquillo seguirá siendo para Whalley, arquero del filial.