El seleccionador español dijo tras la aprobación de medidas contra la violencia ultra que "no es fácil dar con la tecla para que no vuelvan a ocurrir" casos como el registrado el pasado domingo. "Ojalá se consiga erradicar la violencia del deporte, porque hay violencia verbal, física y hasta a los propios árbitros les insultan", aseveró ayer en Segovia el técnico de La Roja.