Si se hubiesen intercambiado sus cascos, nadie se hubiera extrañado del resultado, porque Valtteri Bottas se vistió de Hamilton para batir al inglés en toda regla y liderar un nuevo doblete de Mercedes frente a un lento Sebastian Vettel y pese a la remontada de Charles Leclerc con el segundo Ferrari. El coche de seguridad no llegó a entrar como se esperaba en el circuito urbano de Bakú y apenas hubo sorpresas. Carlos Sainz sumó los primeros puntos del año tras una gran carrera en Azerbaiyán que le llevó hasta la séptima posición.

Charles Leclerc fue el gran protagonista de la primera parte de la carrera. Era el único piloto de los diez primeros —arrancó octavo— con neumáticos medios en lugar de los blandos del resto. Eso le costó perder dos puestos en la arrancada, pero a partir de ahí fue remontando uno a uno. Ricciardo, Sainz, Norris, Pérez, Verstappen.… fueron cayendo a manos del joven monegasco. En la décima vuelta ya estaba cuarto, a tres segundos de Vettel, a un ritmo de 1.4 segundos más rápido que su compañero de equipo. Mattia Binotto, el jefe de Ferrari, evitó el adelantamiento al ordenar entrar a Vettel en la vuelta 12. De este modo, Leclerc lideraba la carrera en vuelta 30, sin entrar en boxes, y con la ventaja suficiente sobre los Mercedes para mantener el liderato si un coche de seguridad entraba en pista y le permitía realizar un cambio de ruedas.

Pero ese coche de seguridad nunca llegó, nada que ver con las tres ediciones anteriores de la carrera de Bakú. «Creo que tengo que parar», decía por radio el monegasco de 21 años, pero en Ferrari le mantuvieron en pista esperando por el coche de seguridad, y también, como tapón a los Mercedes que llegaban a toda velocidad por detrás.

ESTRATEGIA FALLIDA

En cuanto las flechas de plata le pasaron, Ferrari mandó entrar a Leclerc. Para entonces había perdido la cuarta posición en favor de Max Verstappen. La estrategia no sirvió de mucho porque Vettel no consiguió recortar a los Mercedes. «Las oportunidades llegarán al final», explicó Bono, el ingeniero de Hamilton, al chico de Stevenage. Y llegaron para el pentacampeón. Hamilton llegó a colocarse a 1.2 segundos de Bottas, que encontró un aliado perfecto en un Williams doblado para poder utilizar el DRS y defenderse del inglés en el último giro.

Era el justo resultado para el finlandés tras lograr la pole, defender el primer puesto en la arrancada y aguantar la presión de Hamilton «sin cometer un error», como explicó el propio finlandés tras sobrepasar a Lewis en la prueba y en la clasificación para situarse líder del Mundial por primera vez en su carrera. «Me alegro por él porque ha hecho una gran carrera sin fallo alguno», confirmó Hamilton. El hambre de Bottas quedó de manifiesto al buscar el punto extra a cinco vueltas del final, aunque finalmente ese premio fue para Charles Leclerc, tras montar neumáticos nuevos a cuatro vueltas del final.

Carlos Sainz atrapó un fenomenal séptimo puesto después de una dudosa estrategia de McLaren. El madrileño arrancó por detrás de su compañero Lando Norris, pero le adelantó en pista antes de la primera parada. Pero McLaren permitió un undercut de Norris sobre Sainz buscando un overcut del madrileño sobre Sergio Pérez. Al final, se mostró «contento de luchar por la sexta posición y de sumar los primeros puntos del año».

LA EXPLICACIÓN DE SAINZ

«Por fin no nos pasa nada raro y demostramos lo que somos capaces de hacer. He salido bien. En la primeras seis o siete vueltas he estado donde quería estar, atacando a (Sergio) Pérez, que luego ha parado para protegerse de nosotros», señaló el piloto español, que explicó después los momentos clave de la carrera: «Hemos intentado ir largos para ver si podíamos hacerle un undercut (adelantar a Pérez retrasando la parada en boxes), pero nos quedaban pocas ruedas y hemos caído detrás de Lando (Norris) y de nuevo tras Pérez. Luego traté de guardar ruedas par atacarle de nuevo, pero él ha revivido tras el safety car y ya no he podido adelantarle en la carrera», agregó para concluir Carlos Sainz.