El fútbol, el baloncesto y el atletismo son los deportes reyes de los Juegos Escolares de Aragón. Pero la escalada ha adquirido un gran crecimiento desde que se creó hace una década. La Federación Aragonesa de Montañismo fue pionera en su tiempo de una modalidad que atrae cada vez a más niños. Pese a que los escaladores se cuelgan de la pared por encima de los diez metros, es una especialidad segura, espectacular, amena y divertida.

El pasado domingo culminó la temporada en Ejea de los Caballeros. El pabellón en recuerdo del himalayista Santiago Sagaste albergó la final del Campeonato de Aragón escolar. Allí se dieron cita los mejores. Lucharon por los títulos 14 cadetes, 22 infantiles, 27 benjamines y 30 alevines.

«Cada vez hay más afición y es una especialidad que está en auge. Hace dos años hubo en el Campeonato de Aragón escolar 150 competidores puesto se que incluyó la iniciación, niños que tienen 6 y 7 años. En Ejea no se incluyeron. Hay escaladores de nivel y con 14 y 15 años ya entran en el Centro de Tecnificación de Escalada y llevan un entrenamiento más específico. Con 12 años ya pueden competir en la Copa de España sub-16», indica Carlos Oliva, árbitro nacional de escalada y vocal de árbitros en la Federación Aragonesa.

La prueba contó con escaladores de Montañeros de Zaragoza, Montañeros de Barbastro, Pablo Serrano de Zaragoza, Top 30, Helios, All Radical, Peña Guara, Zuera, Daroca, Monreal, Comarca de Teruel, Jiloca y Ejea, La competición a lo largo de la temporada se estructuró en fases locales y después se celebraron los Campeonatos Provinciales que tuvieron como sedes a Zuera, Huesca y Monreal del Campo. «El rocódromo de Ejea es ancho y tiene una altura de 11 metros. Aquí se jugaron los títulos de dificultad y el bloque tuvo como sede Calatorao», afirma Oliva.

Las vías fueron diseñadas por dos equipadores. «Se trazaron en base a las categorías. A veces es difícil de ajustar para los niños porque pueden haber muchos empates». Los benjamines y alevines realizaron las vías al flash, con una demostración de cómo transcurría la vía. En infantil, cadete y juvenil pudieron visualizarla durante 4 minutos para así decidir los movimientos mejores para superarla y después iban a la zona de aislamiento. «Los benjamines, alevines y cadetes tenían la cuerda por arriba y si tenían una caída, se quedaban colgados», apunta Carlos Oliva.

El Club de Montaña Helios se llevó el premio a la más numerosa participación en la fase local y All Radical, al mejor equipo en el Regional por las posiciones de sus escaladores. En la categoría alevín se impusieron Lizer Aznárez, del CN Exea y Naiara Martín, de Comarca del Jiloca, mientras que en benjamín los ganadores fueron Chabier Velilla, del Helios, e Irene Soriano, de The Limit. Los mejores infantiles fueron Pedro Novella, de All Radical y María Laborda, del CM Exea y por fin en cadetes los campeones de Aragón fueron Christian Pérez, de la Comarca de Teruel y Lourdes Hernández, del Club de Montaña Monreal. Por primera vez se disputará el Campeonato de España de dificultad. Se llevará a cabo el 7 de julio en Santiago de Compostela y la territorial seleccionará a seis escaladores nacidos en los años 2003 y 2004.

La competición contó con 5 jueces, que eran un presidente de jurado y 4 jueces de vía. «Se puntúa el que más arriba llega. En la fase clasificatoria el número de tops conseguidos fue muy grande. Todos los que están igualados realizan una vía para desempatar. Si persiste la igualdad gana el que lo hace en el menor tiempo», indica Carlos Oliva. Los niños ya comienzan a escalar en iniciación. Tienen 6 y 7 años. «Lo que se prima es el esfuerzo y la solidaridad. Los hay que se entrenan, pero no les gusta competir. A lo largo del año se realizan encuentros de iniciación en diferentes rocódromos de Aragón», explica Oliva.