Un árbitro de fútbol sala fue brutalmente agredido por un jugador en un partido disputado este sábado en Barcelona, en el pabellón municipal Marítim. El encuentro, del grupo 3 de la Segunda División B (la tercera máxima categoría estatal), enfrentaba al Barceloneta Futsal CE con el Olympic La Floresta, equipos que luchan por no descender de categoría. Un futbolista del equipo local propinó un puñetazo a uno de los árbitros de campo después de que este señalara una falta.

La agresión sucedió a 40 segundos para el final con el marcador empatado (3-3), resultado con el que terminó el partido. El colegiado que señaló la falta iba a amonestar con amarilla al infractor. En este momento, el futbolista del Barceloneta empezó a insultar al árbitro, por lo que este cambió de amarillo a rojo el color de la cartulina. Antes de mostrársela, el jugador, cara a cara con el colegiado, le amenazó al grito de: «Sácamela, sácamela». Acto seguido, el futbolista agredió al árbitro cuando este le iba a mostrar la tarjeta. El colegiado quedó conmocionado por el puñetazo. Hace un año el delegado del equipo barcelonés agredió a otro árbitro.