Se asustó Busquets. Se asustó Luis Enrique. Se asustó el equipo. Y hasta Ricard Pruna, el médico, iba más que inquieto cuando corría por el césped para ver ese maltrecho tobillo derecho. Pero, al final, es un problema menor.

Ya en el vestuario de Ipurúa, Pruna tranquilizó a Luis Enrique, convencido de que no sería tan grave como temieron. El pilar del Barça es poco menos que indestructible. Solo puede doblarse un poco cuando dañan los ligamentos de su tobillo. Además, es siempre el mismo tobillo: el derecho. Así ocurrió, por ejemplo, en El Madrigal hace casi dos años (marzo del 2015) cuando dejó el césped también en camilla, al igual que sucedió en Eibar. Entonces, todos se asustaron. Él, más que nadie, pero aquella sindesmosis en el tobillo derecho tan solo le hizo perderse tres encuentros, su peor racha como profesional.

Ahora, una vez realizadas diversas pruebas médicas, se ha confirmado que Busquets padece un esguince en el ligamento lateral externo del tobillo derecho. El club, sin embargo, no ha querido facilitar el tiempo que deberá estar («pendiente de la evolución»), de baja, aunque se situaría en torno a los 10 o 15 días.

Curiosamente, Escalante no vio cartulina alguna y ni tan siquiera se pitó falta en esa acción. Con Busi camino del vestuario en la camilla, escoltado por Pruna y recibiendo la última carantoña de Rakitic, su sustituto, el Barça quedó impactado. Se notó, y mucho, en su juego, superado en ese tramo del partido por la presión del equipo de Mendilibar, poco acostumbrados como están los azulgranas a vivir sin su referencia en el centro del campo.

Rakitic o André Gomes

No es solo cuestión de hábito o de influencia sino que Busi tan solo se ha perdido nueve encuentros por lesión desde que Guardiola lo situó en el hogar que él había ocupado años antes. Sometido como está a la presión de los rivales, expuesto a esfuerzos adicionales en su inmersión como faro del nuevo entramado táctico que proyecta el ecosistema adecuado para el tridente, él siempre está ahí. Pocos resisten como él, titular en 27 de los 32 partidos de este curso.

«Me ha gustado Ivan en esa posición, ha estado especialmente bien», contó Luis Enrique, ensalzando a Rakitic, que fue medio centro ante el Leganés y Granada y empleó a André Gomes contra el Borussia y Hércules. «Tengo muchas opciones ahí. No me voy a quejar yo que tengo todos los cromos...». Pero ningún cromo vale tanto como el de Busi.