El enfado que provocó Valentino Rossi a Honda al ganar el Gran Premio de Suráfrica de motociclismo con la Yamaha M1 lo ha terminado pagando Ferrari. La parrilla de hoy en el GP de San Marino estará liderada por un Honda, el del británico Jenson Button (1.19.753 minutos). Luego, sí, luego estará el Ferrari de siempre, el del alemán Michael Schumacher (1.20.011). Y un poquito más allá, no mucho más atrás, en la tercera fila, arrancará, seguro que con alguna sorpresa, el Renault del asturiano Fernando Alonso (1.20.895).

La marca roja sufrió ayer su primera derrota de la temporada tras lograr pole y victoria en Australia, Malaisia y Bahrain. Ayer, ante miles de tifosi ilusionados, el británico Jenson Button, de 24 años, derrotó, en una vuelta al dios Michael Schumacher. Honda presentó así su candidatura al podio, a la victoria, a convertirse, por qué no, en la única alternativa a Ferrari.

UN TRAZADO COMPLICADO Schumacher ya no es el mariscal de campo de inicio de temporada. Ni siquiera estará protegido por Barrichello, arrinconado al fondo de la segunda fila. Schumi arrancará emparedado entre el Honda de Button y el Williams de Montoya. Y, ojo, que por detrás arrancará Alonso, el mejor en las salidas. Esa salida provocará hoy un cosquilleo especial. Hace 10 años fue el preludio de una tragedia, la de Senna. A las 14.18 horas, miren al cielo. Piensen en Magic .